Relación acerca de las antigüedades de los indios/19

CAPITULO XVIII

Cómo los parientes del muerto se vengan cuando han tenido respuesta por medio de las bebidas.

Júntanse un día los parientes del muerto, esperan al mencionado buhitihu, y le dan tantos palos que le rompen las piernas, los brazos y la cabeza, de modo que lo muelen, y dejándolo así, creen haberle muerto. A la noche dicen que van muchas sierpes de diversas clases, blancas, negras, verdes y de otros muchos colores, las cuales lamen la cara y todo el cuerpo del médico que dejaron por muerto, como hemos dicho. Este permanece así dos o tres noches; en este tiempo, dicen que los huesos de las piernas y de los brazos tornan a unirse y se sueldan, de modo que se levanta, camina despacio y se vuelve a su casa; quienes lo ven le interrogan diciendo: "¿no estabas muerto?”; pero él responde que los cemíes fueron en su auxilio en forma de culebras. Los familiares del muerto, muy airados, como creían haber vengado la muerte de su pariente, viéndolo vivo se desesperan, y procuran tenerle a mano para matarlo; si lo pueden coger otra vez, le sacan los ojos y le rompen los testículos, porque dicen que ninguno de estos médicos puede morir a palos y golpes, por muchos que reciba, si antes no le arrancan los testículos.