Reflexiones o sentencias: 38


§ 371. Perdonamos por lo regular á los que nos fastidian; pero no perdonamos á los que se fastidian de nosotros.


§ 372. El interes, á quien se atribuyen todos nuestros defectos, merece por lo comun la gloria de nuestras buenas acciones.


§ 373. Casi no hallamos ingratos mientras estamos en proporcion de hacer bien.


§ 374. Tan honesto es gloriarse uno consigo mismo, como ridículo hacerlo con otros.


§ 375. Hacemos virtud de la moderacion para contener la ambicion de los hombres grandes, y consolar á los medianos de su poca fortuna y mérito.


§ 376. Hay hombres destinados para tontos;que hacen tonterías no solo por su eleccion, sino porque la misma fortuna los compele á hacerlas.


§ 377. Suceden á veces accidentes en la vida, de que para salir bien es preciso ser un poco locos.


§ 378. Hay hombres, en quienes si nunca se ha advertido la ridiculez, es porque no se ha buscado bien.


§ 379 La causa por qué los amantes no se cansan de estar juntos es, porque siempre hablan de sí mismos.


§ 380. ¿Por qué tenemos harta memoria para retener hasta las mas mínimas particularidades de lo que nos ha sucedido, y no tenemos la bastante para acordarnos de las veces que lo hemos contado á una misma persona?