Puro y Luciente sol

Puro y Luciente sol
de Dionisio de Solís


 Puro y Luciente sol, ¡oh, qué consuelo   
 al alma mía en tu presencia ofreces,   
 cuando con rostro cándido esclareces   
 la oscura sombra del nocturno velo!   
 

 ¡Oh, cómo animas el marchito suelo 
 con benéfica llama! Y ¡cómo creces   
 inmenso y luminoso, que pareces   
 llenar la tierra, el mar, el aire, el cielo!   
 

 ¡Oh sol! Entra en la espléndida carrera   
 que te señala el dedo omnipotente,  
 al asomar por las etéreas cumbres;   
 

 y tu increado Autor piadoso quiera,   
 que desde oriente a ocaso eternamente   
 pueblos felices en tu curso alumbres!