Peticiones del pueblo al Congreso Nacional en septiembre de 1811


El pueblo protesta sus consideraciones hacia el Congreso y pide lo siguiente[1]:

Saldrán fuera de la Sala a la Secretaría: don Juan Antonio Ovalle, don Domingo Díaz Muñoz, don José Santiago Portales, don Juan José de Goycolea, el Padre Chaparro, don Gabriel Tocornal, don José Miguel Infante, Quinta Alegre y don Manuel Fernández. Luego que salgan, se pide su remoción, y que entretanto se retengan en dicha pieza.

Es la voluntad del pueblo reducir a seis sus diputados, con tal que se rebajen también los de algunas provincias, quedando en dos los de Concepción, y en uno todas las demás.

Para subrogar los dos que faltan, nombra a don Joaquín Larraín y a don Carlos Correa.

Quiere el pueblo que para el poder ejecutivo se nombre una Junta compuesta de cinco vocales, y dos secretarios, cuya duración no baje de tres años, y que sus miembros sean don Juan Enrique Rosales, don Juan [Martínez] de Rozas, don Martín [Calvo] Encalada, don Juan Mackenna y don Gaspar Marín, y si se ausenta éste, o no acepta, el Doctor don Joaquín Echeverría. Secretarios, don José [Gregorio] Argomedo y don Agustín Vial. Sus facultades, las que las Cortes dieren primero a la Regencia de España.

Que ningún fraile pueda ser diputado, ni sean electos, o admitidos a este empleo, sujetos que no sean de probada adhesión al sistema.

Serán separados de sus destinos el Doctor Sánchez, el Procurador de Ciudad, el Escribano sustituto de gobierno, y [Francisco Javier] Reina.

Serán confinados don Manuel Fernández a Combarbalá, don Domingo Díaz Muñoz y don Juan Antonio Ovalle a sus haciendas, por seis años; y si se les comprende alguna trama o infracción, serán pasados por las armas como traidores al Rey y a la patria. Don Antonio Mata a su chacra y don Juan Manuel Cruz a Tucapel, Infante a Melipilla. La Comandancia de Artillería a Mackenna, y para Valparaíso se recomiendan a don Francisco [de la] Lastra y al Capitán [Carlos] Spano.

El Congreso tratará de acabar sus funciones dentro de cuatro meses, y podrá juntarse un bimestre en cada año, esperando sus nombramientos, completo el término de su elección.