Pensamientos persas

Nota: En esta transcripción se ha respetado la ortografía original.


Pensamientos persas.

— Cuando vayas á castigar tu camello porque no quiere andar, piensa antes en si hace mucho tiempo que no come.

—Dulce es el fruto del estudio y amargo el de la esperiencia. El que con esta se instruye no tratará con cariño á su maestra. — La actividad de algunos hombres es como la del caballo á quien hiere el acicate. El poder estarse quietos no es pequeña rentiira.

— Cuando Mehemet va á la plaza, se vé rodeado de gentes que le aprietan la mano y le dicen afectuosamente: — Dios te guarde, amigo mió: y cuando entra en casa, esclama suspirando: ¡Quién tuviera un amigo!

— Habla poco al que te observe, y observa mucho al que habla poco.

— Cuando entres en una casa, no te sacudas el polvo si antes no han venido á quitarte el bordón dé las manos.

— El que aprieta mucho la naranja, bebe jugo amargo; el que no la aprieta bastante, bebe poco. Solo el prudente sabe beber mucho y beber jugo dulce.