Pedro de Urdemalas/Jornada I

Pedro de Urdemalas
de Miguel de Cervantes
Jornada I

Jornada I

Entran PEDRO DE VRDEMALAS
en hábito de moço de labrador,
y CLEMENTE como zagal.



CLEMENTE

De tu ingenio, Pedro amigo,
y nuestra amistad se puede
fiar mas de lo que digo,
porque el al mayor excede,
y della el mundo es testigo;
assi, que es de calidad 5
tu ingenio y nuestra amistad,
que, sin buscar otro medio,
en ambos pongo el remedio
de toda mi enfermedad.
Essa hija de tu amo, 10
la que se llama Clemencia,
a quien yo justicia llamo,
la que huye mi presencia,
qual del caçador el gamo;
essa, a quien naturaleza 15
dio el estremo de belleza
que has visto, me tiene tal,
que llega al punto mi mal
do llega el de su lindeza.
Quando pense que ya estaua 20
algo credula al cuydado
que en mis ansias le mostraua,
yo no se quien la ha trocado
de cordera en tigre braua, 25
ni se yo por que mentiras
sus mansedumbres en yras
ha buelto, ni se, ¡o amor!,
por que con tanto rigor
contra mi tus flechas tiras.

PEDRO

Bobear; dime, en efeto,
lo que quieres.


CLEMENTE

Pedro hermano,
que me libres deste aprieto
con algun consejo sano
o ayuda de hombre discreto. 35


PEDRO

¿Han llegado tus desseos
a mas que dulces floreos,
o has tocado en el lugar
donde amor suele fundar
el centro de sus empleos? 40


CLEMENTE

Pues sabes que soy pastor,
entona mas baxo el punto,
habla con menos primor.


PEDRO

Que si eres, te pregunto,
Amadis o Galaor. 45


CLEMENTE

No soy sino Anton Clemente,
y andas, Pedro, impertinente
en hablar por tal camino.


PEDRO

Pan por pan, vino por vino,
se ha de hablar con esta gente. 50
¿Haste visto con Clemencia
a solas o en parte escura,
donde ella te dio licencia
de alguna desemboltura
que encargasse la conciencia? 55

CLEMENTE

Pedro, el cielo me confunda,
y la tierra aqui me hunda,
y el ayre jamas me aliente,
si no es vn amor decente
en quien el mio se funda. 60
Del padre el rico caudal
el mio pobre desprecia
por no ser al suyo ygual,
y entiendo que sólo precia
el de Llorente y Pascual, 65
que son ricos, y es razon
que se lleue el coraçon
tras si de qualquier muger,
no el querer, sino el tener
del oro la possession. 70
Y, demas desto, Clemencia
a mi amor no corresponde,
por no se que impertinencia
que le han dicho, y assi esconde
de mis ojos su presencia; 75
y si tu, Pedro, no hazes
de nuestras riñas las pazes,
ya por perdido me cuento.


PEDRO

O no tendre entendimiento,
o he de trazar tus solazes. 80
Si sale, como imagino,
oy mi amo por alcalde,
te digo, como adiuino,
que oy no te truxo de valde
a hablar conmigo el destino. 85
Tu verás cómo te entrego
en holgança y en sossiego
el bien que interes te veda,
y que al dartele preceda
promessa, dadiua y ruego. 90
Y, en tanto que esto se traza,
buelue los ojos y mira
los lazos con que te enlaza
amor, y por quien suspira
Febo, que alli se disfraza; 95
mira a los rubios cabellos
de Clemencia, y mira entre ellos
al lasciuo amor jugando,
y cómo se va admirando
por ver que se mira en ellos. 100
Benita viene con ella,
su prima, qual si viniesse
con el sol alguna estrella
que no menos luz nos diesse
que el mismo sol: tal es ella. 105
Clemente, ten aduertencia
que, si llega aqui Clemencia,
te le humilles; yo a Benita,
como a vna cosa bendita,
le pienso hazer reuerencia. 110
Dile con lengua curiosa
cosas de que no disguste,
y ten por cierta vna cosa:
que no ay muger que no guste
de oyrse llamar hermosa. 115
Liberal desta moneda
te muestra; no tengas queda
la lengua en sus alabanças;
verás boluer las mudanças
de la variable rueda. 120

(Entran CLEMENCIA y BENITA,
zagalas, con sus cantarillas,
como que van a la fuente.)



BENITA

¿Por que te buelues, Clemencia?


CLEMENCIA

¿Por que me bueluo, Benita?
Por no verme en la presencia
de quien la salud me quita
y me da mortal dolencia; 125
por no ver a vn insolente
que tiene bien diferente
de la condicion el nombre.


BENITA

Apostaré que es el hombre
por quien lo dizes Clemente. 130


CLEMENTE

¿Soy basilisco, pastora,
o soy alguna fantasma
que se aparece a deshora,
con que el sentido se pasma
y el ánimo se empeora? 135


CLEMENCIA

No eres sino vn parlero,
adulador, lisongero
y, sin por que, jactancioso,
en verdades mentiroso
y en mentiras verdadero. 140
¿Quándo te he dado yo prenda
que de mi amor te assegure
tanto, que claro se entienda
que, aunque el amor me procure,
no ayas temor que te ofenda? 145
Esto dixiste a Iacinta,
y le mostraste vna cinta
encarnada que te di;
y en tu rostro se ve aqui
aquesta verdad distinta. 150

CLEMENTE

Clemencia, si yo he dicho cosa alguna
que no vaya a seruirte encaminada,
venga de la mas próspera fortuna
a la mas abatida y desastrada;
si siempre sobre el cerco de la luna 155
no has sido por mi lengua leuantada,
quando quiera dezirte mi querella,
mudo silencio el cielo infunda en ella;
si mostre tal, la fe en que yo pensaua,
por la ley amorosa, de saluarme, 160
quando a la vida el término se acaba,
por ella entonces venga a condenarme;
si dixe tal, jamas halle en su aljaua
flechas de plomo amor con que tirarme,
si no es a ti, y a mi con las doradas, 165
a elarte y abrasarme encaminadas.


PEDRO

Clemencia, tu padre viene,
y con la vara de alcalde.


CLEMENCIA

No la ha alcançado de valde:
que su salmorejo tiene. 170
Hermano Clemente, a Dios.


CLEMENTE

¿Pues cómo quedamos?


CLEMENCIA

Bien.
Benita, si quieres, ven.


BENITA

Si, pues venimos las dos.


(Entrase BENITA y CLEMENCIA.)

PEDRO

Vete en buen hora, Clemente, 175
y quedese el cargo a mi
de lo que he de hazer por ti.


CLEMENTE

A Dios, pues.


PEDRO

El te contente.


(Sale MARTIN CRESPO, alcalde,
padre de CLEMENCIA,
y SANCHO MACHO
y DIEGO TARUGO, regidores.)


TARUGO

Placenos, Martin Crespo, del sucesso.
Dessecheysla por otra de brocado, 180
sin que jamas vn voto os salga auiesso.


ALCALDE

Diego Tarugo, lo que me ha costado
aquesta vara, sólo Dios lo sabe,
y mi vino, y capones, y ganado.
El que no te conoce, esse te alabe, 185
desseo de mandar.


SANCHO

Yo aquesso digo,
que se que en el todo cuydado cabe.
Veala yo en poder de mi enemigo,
vara que es por presentes adquirida.

ALCALDE

Pues aora la tiene vn vuestro amigo. 190


SANCHO

De vos, Crespo, serà tan bien regida,
que no la doble dadiua ni ruego.


ALCALDE

No, ¡juro a mi!, mientras tuuiere vida.
Quando muger me informe, estare ciego;
al ruego del hidalgo, sordo y mudo: 195
que a la seueridad todo me entrego.


TARUGO

Ya veo en vuestro tiempo, y no lo dudo,
sentencias de Salmon, el rey discreto,
que el niño diuidio con hierro agudo.


ALCALDE

Al menos, de mi parte yo prometo 200
de arrimarme a la ley en quanto pueda,
sin alterar vn minimo decreto.


SANCHO

Como yo lo desseo, assi suceda.
Y a Dios.


ALCALDE

Fortuna os tenga, Sancho Macho,
en la empinada cumbre de su rueda. 205


TARUGO

Sin que el temor o amor os ponga empacho,
juzgad, Crespo, terrible y breuemente:
que la tardança en toda cosa tacho.
Y a Dios quedad.


ALCALDE En fin, soys buen pariente.

(Entranse SANCHO MACHO y DIEGO TARUGO.)


Pedro, que escuchando estàs, 210
¿cómo de mi buen sucesso
el parabien no me das?
Ya soy alcalde, y confiesso
que lo sere por demas,
si tu no me das fauor 215
y muestras algun primor
con que juzgue rectamente:
que te tengo por prudente,
mas que a vn cura y a vn doctor.

PEDRO

Es aquesso tan verdad, 220
qual lo dira la esperiencia,
porque con facilidad
luego os mostrare vna ciencia
que os de nombre y calidad.
Llegaráos Licurgo apenas, 225
y la celebrada Atenas
callará sus doctas leyes;
embidiaros han los reyes
y las escuelas mas buenas.
Yo os metere en la capilla 230
dos docenas de sentencias
que al mundo den marauilla,
todas con sus diferencias,
ciuiles, o de renzilla;
y la que primero a mano 235
os viniere, està bien llano
que no ha de auer mas que ver.


ALCALDE

Desde oy mas, Pedro, has de ser,
no mi moço, mas mi hermano.
Ven, y mostrarásme el modo 240
como yo ponga en efeto
lo que has dicho, en parte o en todo.


PEDRO

Pues mas cosas te prometo.


ALCALDE

A qualquiera me acomodo.


(Entranse el ALCALDE y PEDRO.)

(Salen otra vez SANCHO MACHO y TARUGO.)


SANCHO

Mirad, Tarugo: bien siento 245
que, aunque el parabien le distes
a Crespo de su contento,
otro paramal tuuistes
guardado en el pensamiento;
porque, en efeto, es manzilla 250
que se rija aquesta villa
por la persona mas necia
que ay desde Flandes a Grecia
y desde Egypto a Castilla.

TARUGO

Oy mostrará la experiencia, 255
buen regidor Sancho Macho,
adónde llega la ciencia
de Crespo, a quien yo no tacho
hasta la primera audiencia;
y pues agora ha de ser, 260
soy, Macho, de parecer
que le oygamos.


SANCHO

Sea assi;
aunque tengo para mi
que vn simple en el se ha de ver.


(Entran LAGARTIJA y HORNACHUELOS, labradores.)


HORNACHUELOS

¿De quien, señores, sabremos 265
si el alcalde en casa está?


TARUGO

Aqui los dos le atendemos.


LAGARTIJA

Señal es que aqui saldra.


SANCHO

Tan cierta, que ya le vemos.


(Salen el ALCALDE y REDONDO, escriuano, y PEDRO.)


ALCALDE

¡O valientes regidores! 270


REDONDO

Sientense vuessas mercedes.

ALCALDE

Sin ceremonia, señores.


TARUGO

En cortès, exceder puedes
a los corteses mayores.


ALCALDE

Sientese aqui el escriuano, 275
y a mi yzquierda y diestra mano
los regidores esten;
y tu, Pedro, estaras bien
a mis espaldas.


PEDRO

Es llano.
Aqui, en tu capilla, estan 280
las sentencias suficientes
a quantos pleytos vendran,
aunque nunca pares mientes
a la relacion que haran;
y si alguna no estuuiere, 285
a tu assessor te refiere,
que yo lo sere de modo
que te saque bien de todo,
y sea lo que se fuere.


REDONDO

¿Quieren algo, señores?


LAGARTIJA

Si querriamos. 290


REDONDO

Pues digan: que aqui està el señor alcalde,
que les hara justicia rectamente.


ALCALDE

Perdonemelo Dios lo que aora digo,
y no me sea tomado por soberuia:
tan tiestamenta pienso hazer justicia, 295
como si fuesse vn sonador romano.


REDONDO

Senador, Martin Crespo.


ALCALDE

Alla va todo.
Digan su pleyto apriessa y breuemente:
que apenas me le auran dicho, en mi anima,
quando les de sentencia rota y justa. 300


REDONDO

Recta, señor alcalde.

ALCALDE

Alla va todo.


HORNACHUELOS

Prestóme Lagartija tres reales,
boluile dos, la deuda queda en vno,
y el dize que le deuo quatro justos.
Este es el pleyto. Breuedad, y dixe. 305
¿Es aquesto verdad, buen Lagartija?


LAGARTIJA

Verdad; pero yo hallo por mi cuenta,
o que yo soy vn asno, o que Hornachuelos
me queda a deuer quatro.


ALCALDE

¡Brauo caso!


LAGARTIJA

No ay mas en nuestro pleyto, y me reçumo 310
en lo que sentenciare el señor Crespo.


REDONDO Reçumo por resumo, alla va todo.



ALCALDE

¿Que dezis vos a esto, Hornachuelos?


HORNACHUELOS

No ay que dezir; yo en todo me arremeto
al señor Martin Crespo.


REDONDO

Me remito, 315
¡pese a mi abuelo!


ALCALDE

Dexad(le) que arremeta;
¿que se os da a vos, Redondo?


REDONDO

A mi, no nada.


ALCALDE

Pedro, sacame, amigo, vna sentencia
dessa capilla: la que està mas cerca.


REDONDO

¿Antes de ver el pleyto, ay ya sentencia? 320


ALCALDE

Ai se podra ver quien es Callejas.



PEDRO

Lease esta sentencia, y punto en boca.


REDONDO

«En el pleyto que tratan .N. y .F.»...


PEDRO

Zutano con Fulano significan
la .N. con la .F. entre dos puntos. 325

REDONDO

Assi es verdad. Y digo que «en el pleyto
que trata este Fulano con Zutano,
que deuo condenar, fallo y condeno
al dicho puerco de Zutano a muerte,
porque fue matador de la criatura 330
del ya dicho Fulano...» Yo no atino
que disparate es este deste puerco
y de tantos Fulanos y Zutanos,
ni se cómo es possible que esto quadre
ni esquine con el pleyto destos hombres. 335


ALCALDE

Redondo està en lo cierto. Pedro amigo,
mete la mano, y saca otra sentencia;
podria ser que fuesse de prouecho.


PEDRO

Yo, que soy assessor vuestro, me atreuo
de dar sentencia luego qual conuenga. 340


LAGARTIJA

Por mi, mas que la de vn jumento nueuo.


SANCHO

Digo que el assessor es estremado.



HORNACHUELOS

Sentencia norabuena.


ALCALDE

Pedro, vaya,
que en tu magin mi honra deposito.


PEDRO

Deposite primero Hornachuelos, 345
para mi, el assessor, doze reales.


HORNACHUELOS

Pues sola la mitad importa el pleyto.


PEDRO

Assi es verdad: que Lagartija, el bueno,
tres reales de a dos os dio prestados,
y destos le boluistes dos senzillos; 350
y por aquesta cuenta deueys quatro,
y no, qual dezis vos, no mas de vno.


LAGARTIJA

Ello es ansi, sin que le falte cosa.


HORNACHUELOS

No lo puedo negar; vencido quedo,
y pagaré los doze con los quatro. 355

REDONDO

Ensuziome en Caton y en Iustiniano,
¡o Pedro de Vrde, montañes famoso!,
que assi lo muestra el nombre y el ingenio.


HORNACHUELOS

Yo voy por el dinero, y voy corrido.


LAGARTIJA

Yo me contento con auer vencido. 360


(Entranse LAGARTIJA y HORNACHUELOS.)

(Salen CLEMENTE y CLEMENCIA como pastor y pastora, emboçados.)


CLEMENTE

Permitase que hablemos emboçados
ante tan justiciero ayuntamiento.


ALCALDE

Mas que hableys en vn costal atados;
porque a oyr, y no a ver, aqui me siento.


CLEMENTE

Los siglos que renombre de dorados 365
les dio la antiguedad con justo intento,
ya se ven en los nuestros, pues que vemos
en ellos de justicia los estremos.
Vemos vn Crespo alcalde...


ALCALDE

Dios os guarde.
Dexad aquessas lonjas a vna parte... 370


REDONDO

Lisonjas, dezir quiso.


ALCALDE

Y, porque es tarde,
de vuestro intento en breue nos dad parte.


CLEMENTE

Con verdadera lengua, cierto alarde
haze de lo que quiero parte a parte.


ALCALDE

Dezid: que ni soy sordo, ni lo he sido 375

CLEMENTE

Desde mis tiernos años,
de mi fatal estrella conduzido,
sin las nuues de engaños,
el sol que en este velo està escondido
mirè para adoralle, 380
porque esto hizo el que llegò a miralle.
Sus rayos se imprimieron
en lo mejor del alma, de tal modo,
que en si la conuirtieron:
todo soy fuego, yo soy fuego todo, 385
y, con todo, me yelo,
si el sol me falta que me eclipsa vn velo.
Grata correspondencia
tuuo mi justo y mi cabal desseo:
que amor me dio licencia 390
a hazer de mi alma rico empleo;
en fin, esta pastora,
assi como la adoro, ella me adora.
A hurto de su padre,
que es de su libertad duro tirano, 395
que ella no tiene madre,
de esposa me entregó la fe y la mano;
y agora, temerosa
del padre, no confiessa ser mi esposa.
Teme que el padre, rico, 400
se afrente de mi humilde mediania,
porque haze el pellico
al monge en esta edad de tirania.
El me sobra en riqueza;
pero no en la que da naturaleza. 405
Como el, yo soy tan bueno;
tan rico, no, y a su riqueza ygualo
con estar siempre ageno
de todo vicio perezoso y malo;
y, entre buenos, es fuero 410
que valga la virtud mas que el dinero.
Pido que ante ti buelua
a confirmar el si de ser mi esposa,
y en serlo se resuelua,
sin estar de su padre temerosa, 415
pues que no aparta el hombre
a los que Dios juntò en su gracia y nombre.

ALCALDE

¿Qué respondeys a esto,
sol que entre nuues se cubrio a deshora?


CLEMENTE

Su proceder honesto 420
la tendra muda, por mi mal, agora;
pero señales puede
hazer con que su intento claro quede.


ALCALDE

¿Soys su esposa, donzella?


PEDRO

La cabeça baxò: señal bien clara 425
que no lo niega ella.


SANCHO

¿Pues en que, Martin Crespo, se repara?


ALCALDE

En que de mi capilla
se saque la sentencia, y en oylla.
Pedro, sacala al punto. 430


PEDRO

Yo se que esta saldra pintiparada,
porque, a lo que barrunto,
siempre fue la verdad acreditada,
por atajo o rodeo;
y esta sentencia lo dira que leo. 435

(Saca vn papel de la capilla, y leele PEDRO:)

«Yo, Martin Crespo, alcalde, determino
que sea la pollina del pollino.»


REDONDO

Vaso de suertes es vuestra capilla,
y esta que ha sido agora pronunciada,
aunque es para entre bestias, marauilla, 440
y aun da muestras de ser cosa pensada.


CLEMENTE

El alma en Dios, y en tierra la rodilla,
la vuestra besaré, como a estremada
coluna que sustenta el edificio
donde moran las ciencias y el juyzio 445

ALCALDE

Puesto que redundara esta sentencia,
hijo, en aueros dado el alma mia,
porque no es otra cosa mi Clemencia,
me fuera de gran gusto y alegria.
Y alegrenos agora la presencia 450
vuestra, que està en razon y en cortesia,
pues ya lo desleydo y sentenciado
serà, sin duda alguna, executado.


CLEMENCIA

Pues, con esse seguro, padre mio,
el velo quito, y a tus pies me postro. 455
Mal hazes en vsar deste desuio,
pues soy tu hija, y no espantable monstro.
Tu has dado la sentencia a tu aluedrio,
y, si es injusta, es bien que te de en rostro;
pero, si justa es, haz que se aprueue, 460
con que a deuida execucion lleue.


ALCALDE

Lo que escriui, escriui; bien dizes, hija;
y assi, a Clemente admito por mi hijo,
y el mundo deste proceder colija
que mas por ley que por passion me rijo. 465


SANCHO

No ay alma aqui que no se regozija
de vuestro no pensado regozijo.


TARUGO

Ni lengua que a Martin Crespo no alabe
por hombre ingeniosissimo y que sabe.


PEDRO

Nuestro amo, aueys de saber 470
que es merced particular
la que el cielo quiere hazer
quando se dispone a dar
al hombre buena muger;
y corre el mismo partido 475
ella, si le da marido
que sea en todo varon,
afable de condicion,
mas que arrojado, sufrido.
De Clemencia y de Clemente 480
se hara vna junta dichosa
que os alegre y os contente,
y quien lleue vuestra honrosa
estirpe de gente en gente,
y esta noche de San Iuan 485
las bodas celebrarán,
con el suyo y vuestro gusto.

ALCALDE

Señales de hombre muy justo
todas tus cosas me dan;
pero la boda otro dia 490
se hara: que es noche ocupada
de general alegria
aquesta.


CLEMENTE

No importa nada,
siendo ya Clemencia mia:
que el gusto del coraçon 495
consiste en la possession
mucho mas que en la esperança.


PEDRO

¡O, quántas cosas alcança
la industria y sagazidad!.


ALCALDE

Vamos, que ay mucho que hazer 500
esta noche.


TARUGO

Sea en buen hora.


CLEMENTE

Ni que esperar ni temer
me queda, pues por señora
y esposa te vengo a ver.


TARUGO

¡Bien escogistes, Clemencia! 505


CLEMENCIA

Al que ordenò la sentencia
las gracias se den, y al cielo.


PEDRO

De que he encargado, rezelo,
algun tanto mi conciencia.


(Entranse todos, y, al entrarse,
sale PASCUAL y tira del sayo a PEDRO,
y quedanse los dos en el teatro,
y tras PASCUAL entra vn SACRISTAN.)

PASCUAL

Pedro amigo.


PEDRO

¿Que ay, Pasqual? 510
No pienses que me descuydo
del remedio de tu mal;
antes, en el tanto cuydo,
que casi no pienso en al.
Esta noche de San Iuan 515
ya tu sabes cómo estan
del lugar las moças todas
esperando de sus bodas
las señales que les dan.
Benita, el cabello al viento, 520
y el pie en vna bazia
llena de agua, y oydo atento,
ha de esperar hasta el dia
señal de su casamiento;
se tu primero en nombrarte 525
en su calle, de tal arte,
que claro entienda tu nombre.


PASCUAL

Por excelencia, el renombre
de industrioso pueden darte.
Yo lo hare assi; queda en paz; 530
mas, despues de aquesto hecho,
tu lo que faltare haz,
ansi no abrassa tu pecho
el fuego de aquel rapaz.


[PEDRO] Assi será; ve con Dios. 535



(Vase PASCUAL.)


SACRISTAN

Por ligero que seays vos,
yo os saldre por el atajo,
y buscaré sin trabajo
la industria de ambos a dos.


(Entrase el SACRISTAN.)

(Sale MALDONADO, conde de gitanos;
y aduiertase que todos los que hizieren
figura de gitanos, han de hablar ceceoso.)



MALDONADO

Pedro cenor, Dioz te guarde. 540
¿Que te haz hecho, que he venido
a buzcarte aquezta tarde,
por ver ci eztás ya atreuido,
o todavia cobarde?
Quiero dezir, ci te agrada 545
el cer nueztra camarada,
nueztro amigo y compañero,
como me haz dicho.


PEDRO

Si quiero.


MALDONADO

¿Reparaz en algo?


PEDRO

En nada.


MALDONADO

Mira, Pedro: nueztra vida 550
ez çuelta, libre, curioza,
ancha, holgazana, estendida,
a quien nunca falta coza
que el deceo buzque y pida.
Danoz el heruoço çuelo 555
lechoz; ciruenoz el cielo
de pauellon dondequiera;
ni noz quema el çol, ni altera
el fiero rigor del yelo.
El maz cerrado vergel 560
laz primiciaz noz ofrece
de quanto bueno aya en el;
y apenaz se vee o parece
la aluilla o la mozcatel,
que no eztá luego en la mano 565
del atreuido gitano,
zahori del fruto ageno,
de induztria y ánimo lleno,
agil, prezto, çuelto y çano.
Gozamoz nuestroz amorez 570
librez del dezaçociego
que dan loz competidorez,
calentandonoz çu fuego
cin zeloz y cin temorez.
Y agora eztà vna mochacha 575
que con nadie no ce empacha
en nueztro rancho, tan bella,
que no halla en que ponella
la embidia ni aun vna tacha.
Vna gitana, hurtada, 580
la truxo; pero ella es tal,
que, por hermoza y honrada,
muestra que es de principal
y rica gente engendrada.
Ezta, Pedro, cerá tuya, 585
aunque maz el yugo huya
que rinde la libertad,
quando de nueztra amiztad
lo acordado ce concluya.

PEDRO

Porque veas, Maldonado, 590
lo que me mueue el intento
a querer mudar de estado,
quiero que me estes atento
vn rato.


MALDONADO

De muy buen grado.


PEDRO

Por lo que te he de contar, 595
vendras en limpio a sacar
si para gitano soy.


MALDONADO

Atento eztare y eztoy;
bien puedez ya començar.

PEDRO

Yo soy hijo de la piedra, 600
que padre no conoci:
desdicha de las mayores
que a vn hombre pueden venir.
No se dónde me criaron;
pero se dezir que fuy 605
destos niños de dotrina
sarnosos que ay por ahi.
Alli, con dieta y açotes,
que siempre sobran alli,
aprendi las oraciones, 610
y a tener hambre aprendi;
aunque tambien con aquesto
supe leer y escriuir,
y supe hurtar la limosna,
y desculparme y mentir. 615
No me contentò esta vida
quando algo grande me vi,
y en vn nauio de flota
con todo mi cuerpo di,
donde serui de grumete, 620
y a las Indias fuy y bolui,
vestido de pez y angeo,
y sin vn marauedi.
Temi con los huracanes,
y con las calmas temi, 625
y espantóme la Vermuda
quando su costa corri.
Dexé el comer del vizcocho
con dos dedos de hollin,
y el beuer vino del diablo 630
antes que de San Martin.
Pisè otra vez las riberas
del rico Guadalquiuir,
y entreguéme a sus crecientes,
y a Seuilla me bolui, 635
donde al rateruelo oficio
me acomodè baxo y vil
de moço de la esportilla,
que el tiempo lo pidio ansi;
en el qual, sin ser yo cura, 640
muy muchos diezmos cogi,
haziendo salua a mil cosas
que me condenan aqui.
En fin, por cierta desgracia,
el oficio tuuo fin, 645
y començo el peligroso
que suelen llamar mandil.
En el supe de la hampa
la vida larga y cerril,
formar pendencias del viento, 650
y con el soplo herir.
Mi amo, que era tan brauo
como ligero pasquin,
dio assalto a vna faldriquera
a lo callado y sotil; 655
con las manos en la massa
le cogio vn cierto alguazil,
y el quiso ser en vn potro
confessor, y no martyr;
martir, digo, Maldonado. 660


MALDONADO

En esso, ¿que me va a mi?
Pronunciad como os de gusto,
pues que no hablays latin.

PEDRO

Palme[ó]le las espaldas
contra su gusto el bochin, 665
de lo qual quedò mohino,
segun que dixo vn malsin.
A las casas mouedizas
le lleuaron, y yo vi
arañarse la Escalanta 670
y llorar la Bezerril.
Yo, viendome sin el fieltro
de mi andaluz paladin,
de mandil a mochilero
vn salto forçoso di. 675
Deparóme la fortuna
vn soldado espadachin
de los que van hasta el puerto,
y se bueluen desde alli.
Las boletas rescatadas, 680
las gallinas que cogi,
si no las perdona el cielo,
¡desuenturado de mi!
Diome el rostro aquella vida,
porque della conoci 685
que el soldado churrullero
tiene en las gurapas fin,
y a gentilhombre de playa
en vn punto me acogi,
vida de mil sobresaltos 690
y de contentos cien mil.
Mas, por temor de yrme a Argel,
presto a Cordoua me fuy,
adonde vendi aguardiente,
y naranjada vendi. 695
Alli el salario de vn mes
en vn dia me beui,
porque, si ay agua que sepa,
la ardiente es doctor sotil.
Arrojarame mi amo 700
con vn trabuco de si,
y en casa de vn asturiano
por mi desuentura di.
Hazía suplicaciones,
suplicaciones vendi, 705
y en vn dia diez canastas
todas las jugue y perdi.
Fuyme, y topè con vn ciego,
a quien diez meses serui,
que, a ser años, yo supiera 710
lo que no supo Merlin.
Aprendi la gerigonça,
y a ser vistoso aprendi,
y a componer oraciones
en verso ayroso y gentil. 715
Murioseme mi buen ciego,
dexóme qual Iuan Paulin,
sin blanca, pero discreto,
de ingenio claro y sotil.
Luego fuy moço de mulas, 720
y aun de vn fullero lo fuy,
que con la boca de lobo
se tragara a San Quintin;
gran jugador de las quatro,
y con la sola le vi 725
dar tan mortales heridas,
que no se pueden dezir.
Berrugeta y ballestilla,
el raspadillo y hollin
jugaua por excelencia, 730
y el Mase Iuan hi de ruin.
Gran sage del espejuelo,
y del reten tan sotil,
que no se le viera vn linze
con los antojos del Cid. 735
Cayose la casa vn dia,
vinole su San Martin,
pusiero[n]le vn sobre escrito
encima de la nariz.
Dexéle, y vineme al campo, 740
y siruo, qual ves, aqui,
a Martin Crespo, el alcalde,
que me quiere mas que a si.
Es Pedro de Vrde mi nombre;
mas vn cierto Malgesi, 745
mirandome vn dia las rayas
de la mano, dixo assi:
«Añadiole Pedro al Vrde
vn malas; pero aduertid,
hijo, que aueys de ser rey, 750
frayle, y papa, y matachin.
Y avendraos por vn gitano
vn caso que se dezir
que le escucharán los reyes
y gustarán de le oyr. 755
Passareys por mil oficios
trabajosos; pero al fin
tendreys vno do seays
todo quanto he dicho aqui.»
Y aunque yo no le doy credito, 760
todavia veo en mi
vn no se que que me inclina
a ser todo lo que oi;
pues como deste pronóstico
el indicio veo en ti, 765
digo que he de ser gitano,
y que lo soy desde aqui.

MALDONADO

¡O Pedro de Vrdemalaz generozo,
coluna y cer del gitanezco templo!
Ven, y daraz principio al alto intento 770
que te incita, te mueue, impele y lleua
a ponerte en la lizta gitanezca;
ven a adulzir el agrio y tierno pecho
de la hurtada mochacha que te he dicho,
por quien zeraz dichoso zobremodo. 775


PEDRO

Vamos; que yo no pongo duda en esso,
y espero deste assumpto vn gran sucesso.

(Entranse.)

(Ponese BENITA a la ventana en cabello.


BENITA

Tus alas, ¡o noche!, estiende
sobre quantos te requiebran,
y a su gusto justo atiende, 780
pues dizen que te celebran
hasta los moros de aliende.
Yo, por conseguir mi intento,
los cabellos doy al viento,
y el pie izquierdo a vna vazia 785
llena de agua clara y fria,
y el oydo al ayre atento.
Eres noche tan sagrada,
que hasta la voz que en ti suena
dizen que viene preñada 790
de alguna ventura buena
a quien la escucha guardada.
Haz que a mis oydos toque
alguna que me prouoque
a esperar suerte dichosa.

(Entra el SACRISTAN.)


SACRISTAN

Prenderá a la dama hermosa,
sin alguna duda, el Roque;
Roque ha de ser el que prenda
en este juego a la dama,
puesto que ella se defienda: 800
que su ventura le llama
a gozar tan rica prenda.


BENITA

Roque dizen, Roque oi.
Pues no ay otro Roque aqui
que el necio del sacristan. 805
Veamos si nombraràn
Roque otra vez.


SACRISTAN

Serà assi,
porque es el Roque tal pieça,
que no ay dama que se esquiue
de entregalle su belleza; 810
y, aunque en estrecheza viue,
es muy rico en su estrecheza.

BENITA

Ce, gentilombre, tomad
este liston, y mostrad
quien soys mañana con el. 815


SACRISTAN

Sereos en todo fiel,
estremo de la veldad:

(Estandole dando vn liston BENITA al SACRISTAN,
entra PASQUAL, y asele del cuello, y quitale la cinta.)


que qualquiera que seays
de las dos que en esta casa
viuis, se os auentajays 820
a Venus.


PASCUAL

¿Que aquesto passa?
¿Que esta cuenta de vos days?
Benita, ¿que a vn sacristan
vuestros despojos se dan?
Graue fuera aquesta culpa, 825
si no tuuiera disculpa
en ser noche de San Iuan.
Vos, bachiller graduado
en letras de canto llano,
¿de quien fuistes auisado 830
para ganar por la mano
el juego mal començado?
¿Assi a maytines se toca
con vuestra verguença poca?
¿Assi os hazen oluidar 835
del cantar y repicar
los picones de vna loca?

(Entra PEDRO.)
PEDRO

¿Que es esto, Pasqual amigo?


PASCUAL

El sacristan y Benita
han querido sea testigo 840
de que ella es muger bendita,
y el de embustes enemigo;
mas, porque no se alborote,
y vea que al estricote
le trae su honra su intento, 845
por testigos le presento
esta cinta y este zote.


SACRISTAN

Por las santas vinageras,
a quien dexo cada dia
agostadas y ligeras, 850
que no fue la intencion mia
de burlarme con las veras.
Oy a las dos os oi
lo que auia de hazer alli
Benita, en cabello puesta, 855
y, por gozar de la fiesta,
vine, señores, aqui.
Nombrème, y ella acudio
al reclamo, como quien,
del primer nombre que oyo, 860
de su gusto y de su bien
indicio claro tomó:
que la vana echizeria
que la noche antes del dia
de San Iuan vsan donzellas, 865
haze que se muestren ellas
de liuiana fantasia.

PASCUAL

¿Para que te dio esta cinta?


SACRISTAN

Para que me la pusiesse,
y conocer por su pinta 870
quien yo era, quando fuesse
ya la luz clara y distinta.


BENITA

¿Para que a tantas preguntas
te alargas, Pasqual? ¿Barruntas
mal de mi? Mas no lo dudo, 875
porque, en mi daño, de agudo
siempre he visto que despuntas.


PASCUAL

Assi con essa verdad
se te arranque el alma, ingrata,
sospechosa en la amistad, 880
que con mas llaneza trata
que vio la sinceridad.
Los alamos de aquel rio,
que con el cuchillo mio
tienen grauado tu nombre, 885
te diran si yo soy hombre
de buen proceder vazio.


PEDRO

Yo soy testigo, Benita,
que no ay haya en aquel prado
donde no te vea escrita, 890
y tu nombre coronado
que tu fama solicita.

PASCUAL

¿Y en que junta de pastores
me has visto que los loores
de Benita no alcè al cielo, 895
descubriendo mi buen zelo
y encubriendo mis amores?
¿Que almendro, guindo o mançano
has visto tu que se viesse
en dar su fruto temprano, 900
que por la mia no fuesse
traydo a tu bella mano
antes que las mismas aues
le tocassen? Y aun tu sabes
que otras cosas por ti he hecho 905
de tu honra y tu prouecho,
dignas de que las alabes.
Y en los arboles que aora
vendran a enrramar tu puerta,
verás, cruel matadora, 910
cómo en ellos se vee cierta
la gran fe que en mi alma mora.
Aqui verás la verbena,
de raras virtudes llena,
y el rosal, que alegra al alma, 915
y la vitoriosa palma,
en todos sucessos buena.
Verás del alamo erguido
pender la delgada oblea,
y del valle aqui traydo, 920
para que en tu puerta sea
sombra al sol, gusto al sentido.

BENITA

No ayas miedo me prouoque
tu arenga a que yo te toque
la mano, encuentro amoroso, 925
porque no ha de ser mi esposo
quien no se llamare Roque.


PEDRO

Tu tienes mucha razon;
pero el remedio està llano
con toda satisfacion, 930
porque nos le da en la mano
la santa confirmacion.
Puede Pasqual confirmarse,
y puede el nombre mudarse
de Pasqual en Roque, y luego, 935
con su gusto y tu sossiego,
puede contigo casarse.


BENITA

Desse modo, yo lo aceto.


SACRISTAN

¡Gracias a Dios que me veo
libre de tan grande aprieto! 940


PEDRO

Que has hecho vn gallardo empleo,
Benita, yo te prometo,
porque aquel refran que passa
por gente de buena massa,
que es discreto determino: 945
«Al hijo de tu vezino,
limpiale y metele en casa.»


BENITA

Ponte esse liston, Pasqual,
y en parte do yo le vea.

PASCUAL

Pienso hazer del el caudal 950
que haze de su librea
Iris, arco celestial.
Esperate, que ya suena
la musica que se ordena
para el traer de los ramos. 955


PEDRO

Con gusto aqui la esperamos.


BENITA

Ella venga en hora buena.


(Suena dentro todo genero de musica,
y su gayta zamorana; salen todos los que pudieren con ramos,
principalmente CLEMENTE, y los musicos entran cantando esto:)


[MUSICOS]

«Niña, la que esperas
en reja o valcon,
aduierte que viene 960
tu polido amor.
Noche de San Iuan,
el gran Precursor,
que tuuo la mano
mas que de relox, 965
pues su dedo santo
tambien señalò,
que nos mostro el dia
que no anochecio;
muestratenos clara, 970
sea en ti el albor
tal, que perlas llueua
sobre cada flor;
y en tanto que esperas
a que salga el sol, 975
di[r]as a mi niña
en suaue son:
"Niña la que esperas, &c."
Diras a Benita
que Pasqual, pastor, 980
guarda los cuydados
de su coraçon;
y que de Clemencia
el que es ya señor,
es su humilde esclauo, 985
con justa razon;
y a la que desmaya
en su pretension,
tenla de tu mano,
no la oluides, non, 990
y dile callando,
o en erguida voz,
de modo que oyga
la imaginacion:
"Niña, la que esperas 995
en rexa o valcon,
aduierte que viene
tu polido amor."»

CLEMENTE

Ello està muy bien cantado.
Ea, enramese este vmbral 1000
por el vno y otro lado.
¿Que hazes aqui, Pasqual,
de los dos acompañado?
Ayudanos, y a Benita
con seruicios solicita, 1005
enramandole la puerta:
que a la voluntad ya muerta
el seruirla resucita.
Esse laurel pon aqui,
esse sauze a essotra parte, 1010
esse alamo blanco alli,
y entre todos tenga parte
el jazmin y el alheli.
Haga el suelo de esmeraldas
la juncia, y la flor de gualdas 1015
le buelua en ricos topacios,
y llenense estos espacios
de flores para guirnaldas.

BENITA

Vaya otra vez la musica, señores,
que la escucha Clemencia; y tu, mi Roque, 1020
(Quitase de la ventana.)
haz que suene otra vez.


PASCUAL

A mi me plaze,
confirmadora dulze hermosa mia.
Bueluanse a repicar essas sonajas,
haganse raxas las guitarras, vaya
otra vez el floreo, y solenizese 1025
esta mañana en todo el mundo célebre,
pues que lo quiere assi la gloria mia.


CLEMENTE

Cantese, y vamos, que se viene el dia:
«A la puerta puestos
de mis amores, 1030
espinas y çarças
se bueluen flores.
El fresno escabroso
y robusta enzina,
puestos a la puerta 1035
do viue mi vida,
veran que se bueluen,
si acaso los mira,
en matas sabeas
de sacros olores, 1040
y espinas y çarças
se bueluen flores;
do pone la vista
o la tierna planta,
la yerua marchita 1045
verde se leuanta;
los campos alegra,
regozija al alma,
enamora a sieruos,
rinde a señores, 1050
y espinas y çarças
se bueluen flores.»


(Entranse cantando.)

(Salen YNES y BELICA, gitanas,
que las podran hazer las
que han hecho BENITA y CLEMENCIA.)



YNES.

Mucha fantasia es essa;
Belilla, no se que diga:
o tu te sueñas condesa, 1055
o que eres del rey amiga.


BELICA

De que sea sueño me pesa.
Ynes, no me des passion
con tanta reprehension;
dexame seguir mi estrella. 1060


YNES.

Confiada en que eres bella,
tienes tanta presuncion.
Pues mira que la hermosura
que no tiene calidad,
raras vezes auentura. 1065


BELICA

Confirmase essa verdad
muy bien con mi desuentura.
¡O cruda suerte inhumana!
¿Por que a vna pobre gitana
diste ricos pensamientos? 1070


YNES.

Aquel fabrica en los vientos,
que a ver quien es no se allana.
Huye dessas fantasias;
ven, y el bayle aprenderas
que començaste estos dias. 1075

BELICA

Ynes, tu me acabarás
con tus estrañas porfias;
pero engañaste en pensar
que tengo yo de guardar
tu gusto qual justa ley, 1080
y sólo ha de ser el rey
el que me ha de hazer baylar.


YNES.

Dessa manera, Belilla,
que vengays al hospital
no será gran marauilla: 1085
que hazer de la principal
no es para vuestra costilla.
¡Acomodaos, noramala,
a la cozina y la sala,
a baylar aqui y alli!. 1090


BELICA

Aquesso no es para mi.


YNES.

¿Pues que? ¿El donayre y la gala,
el rumbo, el cer del tuzon,
derribando por el çuelo
el gitanezco blazon, 1095
leuantado hasta el cielo
por nuestra honezta intencion?
Antes te vea yo comida
de rabia, y antes rendida
a vn gitano que te dome, 1100
o a vn verdugo que te tome
de las espaldas medida.
¿Esto por ti se ha de ver?
¿Que no sea con gitano
gitana, mala muger? 1105
Chico hoyo hagas temprano,
si es que tan mala has de ser.


BELICA

Mucho te alargas, Ynes,
y, como simple, no ves
dónde mi intencion camina. 1110


YNES.

Pues esta simple adiuina
lo que tu verás despues.

(Salen PEDRO y MALDONADO.)
MALDONADO

Esta que ves, Pedro hermano,
es la gitana que digo,
de parecer sobrehumano, 1115
cuya possession me obligo
de entregartela en la mano.
Acaba, muda de trage,
y aprende nuestro lenguage;
y, aun sin aprenderle, entiendo 1120
que has de ser gitano, siendo
cabeça de tu linage.


YNES.

¡Danoz vna limoznica,
cauallero atan garrido!


MALDONADO

¡Desso el labrador se pica! 1125
¡Que mal que le has conocido,
Ynes!


YNES.

Pide tu, Belica.


PEDRO

Si ella pide, no aura cosa,
por grande y dificultosa
que sea, que yo no haga, 1130
sin esperar otra paga
que el seruir a vna hermosa.


MALDONADO

¿No le rezpondes, ceñora?


YNES.

Ceñor conde, vez do viene
la viuda tan guardadora, 1135
que, puesto que mucho tiene,
maz guarda y maz atezora.

(Entra vna VIUDA labradora,
que la lleua vn ESCUDERO labrador de la mano.)
YNES.

Limozna, ceñora mia,
por la bendita Maria
y por çu Hijo bendito. 1140


VIUDA

De mi nunca lleua el grito
limosna, ni la porfia.
Mejor estara el seruir
a vosotras, que os està
tan sin verguença el pedir. 1145


ESCUDERO

Va el mundo de suerte ya,
que no se puede sufrir.
Es vagamunda esta era;
no ay moça que seruir quiera,
ni moço que por su yerro 1150
no se ande a la flor del berro,
el sandio, y ella altanera.
Y esta gente infrutuosa,
siempre atenta a mil malicias,
doblada, astuta y mañosa, 1155
ni a la Yglesia da primicias,
ni al rey no le sube en cosa.
A la sombra de herreros
vsan muchos desafueros,
y, con perdon se ha mentado, 1160
no ay seguro asno en el prado
de los gitanos quatreros.


VIUDA

Dexadlos, y caminad,
Llorente, que es algo tarde.


(Entranse LLORENTE y la VIUDA.)

BELICA

Tomame essa caridad. 1165
No hagays sino hazer alarde
de vuestra necessidad
delante de aquesta gente,
que no faltarà vn Llorente
como otro Gil que os persiga, 1170
y, sin que os de nada, diga
palabras con que os afrente.


MALDONADO

¿Veisla, Pedro? Pues es fama
que tiene diez mil ducados
junto a los pies de su cama, 1175
en dos cofres varreados
a quien sus angeles llama.
Requiebrase assi con ellos,
que pone su gloria en ellos,
y assi, en vellos se desalma: 1180
que han de ser para su alma
lo que a Absalon sus cabellos.
Sólo a vn ciego da vn real
cada mes, porque le reza
las mañanas a su vmbral 1185
oraciones que endereza
al eterno tribunal,
por si acaso sus parientes,
su marido y ascendientes
estan en el purgatorio, 1190
haga el santo consistorio
de su gloria merecientes;
y con sola esta obra piensa
yrse al cielo de rondon,
sin desman y sin ofensa.

PEDRO

Que yo la saque de aron
mi agudo ingenio dispensa.
Informarte has, Maldonado,
de todos los que han passado
deste mundo sus parientes, 1200
amigos y bien querientes,
hasta el sieruo o paniaguado,
y traemelo por escrito,
y verás quan facilmente
de su miseria la quito; 1205
y, a lo que soy suficiente,
a este embuste lo remito.


{{Pt|MALDONADO|
Desde su tercer abuelo
hasta el postrer neteçuelo
que de su linage ha muerto, 1210
te trayre el número cierto,
sin que te discrepe vn pelo.


PEDRO

Vamos, y verás despues
lo que hare en aqueste caso
por el comun interes. 1215


MALDONADO

¿Do encaminarás el passo,
Belica?


BELICA

Do querra Ynes.


PEDRO

Doquiera que le encamines,
tendra por honrosos fines
tu estremado pensamiento. 1220


BELICA

Aunque fabrique en el viento,
Pedro, no te determines
a burlar de mi desseo,
que de lexos se me muestra
vna esperança en quien veo 1225
cierta luz tal, que me adiestra
y lleua al bien que desseo.


PEDRO

De tu rara hermosura
se puede esperar ventura
que la yguale. Ven, gitana, 1230
por quien nuestra edad se vfana
y en sus glorias se assegura.

}}