Parnaso español 274
En caña de pescar trocó Artabano
El cetro, y las insignias soberanas
ocupó diligente en pescar ranas,
por acallar el cieno de un pantano.
Emperador araña, Domiciano,
cazando moscas, infamó sus canas;
cuando cerrando puertas y ventanas,
pudo limpiar las siestas al verano.
Fortuna, ¿no estuvieran más decentes
puestas en un moscón y un renacuajo
las dos coronas, que en tan viles frentes?
Témome que el reinar oficio es bajo,
pues que ruegas, a costa de las gentes,
con cetro a un mosqueador y a un espantajo.