Parnaso español 110

Virtud de la presencia del señor en la agricultura y en la guerra

(Parnaso español)

de Francisco de Quevedo


Más fertilizan mi heredad mis ojos
que el mayo que las lluvias no resista;
pues con el beneficio de mi vista,
en espigan reviven mis rastrojos.


Vuélvense los gañanes en gorgojos
si falta el dueño que al trabajo asista;
y quien espera grano, coge arista,
mal acondicionada con abrojos.


Lo mismo es la batalla que la tierra:
el que la viere dar tendrá victoria,
pues los ojos del rey arman la guerra.


El que manda y gobierna de memoria,
y a su defensa entrambos ojos cierra,
sin cetro y con bordón busca la gloria.