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»Y pidiendo una tableta, escribió : Juan es su nombre. Y se maravillaron todos.
» Y luego fué abierta su boca, y su lengua, y hablaba bendiciendo a Dios.»
Más allá de la aldea, Zacarías tenía una casa de campo. Una antigua capilla, descubierta bajo su suelo, fué restaurada ; un campanario nuevo se erige sobre un pequeño convento.
Es el sitio del Magnificat, en que María vi- sitó a Elisabeth. Nos trasladamos a él, evocan- do otro fragmento de San Lucas.
«Y en aquellos días, levantándose María, fué
- con priesa a la montaña, a una ciudad de Judá.
» Y entró en casa de Zacarías y saludó a Eli- sabeth.
» Y cuando Elisabeth-oyó la salutación de Ma- ría, la criatura dió saltos:en su vientre: y fué llena del Espíritu Santo.
» Y exclamó en alta voz, y dijo: Bendita tú entre las mujeres, y bendito el fruto de tu vien- tre.
»¿Y de dónde esto a mi, que la madre de mi Señor venga a mi?
» Porque he aquí luego que llegó la voz de tu salutación a mis oídos, la criatura dió saltos de gozo en mi vientre.