Página:Viajes de Gulliver (1914).pdf/370

Esta página no ha sido corregida
— 369 —

feri la historia de nuestra holandesa, que la reina no pudo oir sin verter lágrimas. Entretanto, los desposados se habían retirado a sus respectivos cuartos, que el rey les había señalado en palacio, amueblados como el del mismo soberano. Luego que volvieron al salón, apareció repentinamente como por arte mágico un teatro, cuyas ostentosas y singulares decoraciones excedían con mucho a cuanto he visto de su clase en Italia. Representóse una comedia, y acabaron los regocijos de aquel día.

En el siguiente volvieron a empezar, y continuaron hasta veinte días sin interrupción; cosa que no se había visto hasta entonces en Sevarambia sino en las bodas de los reyes. Paseos, banquetes, conciertos, tragedias, comedias, óperas alternaban sin cesar. Me acuerdo de que entre otras representaron una vez los Amores de Marte y Venus, pues los sevarambos saben la mitologia de los griegos tan bien como nosotros. Las voces eran asombrosas, las palabras acomodadas a la música y el lenguaje muy parecido ai italiano por su dulzura. He aquí algunos versos que he retenido y que Marte cantaba a Venus en un bosque de cipreses donde la encontró, para que se pueda juzgar de la lengua sevaramba : Crema Splesso pil carmina Nil formoso pelte trano Spum fel trotso Croni tano Meluc causo tunc te fina.

Quiere decir (bien que su elegancia debe perder mucho en una traducción en prosa) que aparten de los ojos de Venus rayos que inflaman el corazón de Marte, y que son inextinguibles».

GULLIVER.