Página:Viaje a la Patagonia Austral - Francisco P. Moreno.pdf/101

Esta página ha sido corregida
— 98 —

ASCENSION DEL RIO SANTA CRUZ

Enero 12-14.—Los días transcurridos entre nuestro regreso de Shehuen-Aiken y el señalado para la partida definitiva, los empleamos en arreglar el velamen de la embarcación, que es demasiado grande, y en construir dentro de ésta divisiones destinadas a contener las provisiones necesarias para el viaje.

Enero 15.—Todo queda listo, temprano, y los víveres embarcados; hacemos cruzar la caballada a la ribera del norte, que es la elegida para principiar la labor que debe conducirnos a los Andes. A mediodía, después de haber almorzado, todos juntos los habitantes de la isla, y de habernos regalado con los mejores manjares de que aquí podemos disponer, nos despedimos del señor Dufour, brindando por el buen resultado del viaje.

Entre saludos, con las banderas izadas en el mástil de la ballenera, y sobre la casa de la isla, las salvas de los revólvers y los «adiós» deseándonos mutuas felicidades, llegamos al costado opuesto donde nos aguarda, listo ya, Isidoro.

Algo de solemne en el fondo, aunque muy vulgar en la apariencia, tiene para mí el momento en que embicamos en el cascajo para principiar el remolque. ¿Llevaré a cabo mi proyecto? ¿Tendré suficiente fuerza para ello?

Todas las expediciones que antes que la que dirijo han intentado descubrir las fuentes del río Santa Cruz, contaron con mayores elementos. En 1834, la que emprendió el ilustre Fitz-Roy, y que es uno de los más importantes trabajos de explo-