- ?
CAPITULO IV SINDICATOS FEMENINOS
I. Las obreras y los sindicatos.—Causas de la abstención del clemento femenino en el movimiento sindical. —Cristianas y sindicadas.—Una elección para miembro del Consejo su- perior del Trabajo. —Candidato de los sindicatos femeninos cristianos: Mlle. Rochebiltard.—II. Fundación de los sindi- catos de obreras lionesas.—Iniciadora de este movimiento. —Comienzos difíciles. —Detalles de organización.—Su ca- rácter exclusivamente obrero.—III. Instituciones anejas á los sindicatos lioneses.—Cursos profesionales. El arte de aproximar las almas femeninas. -- Oficinas paracolocaciones, y Sociedad cooperativa de consumo.—Perspectivas de una cooperativa de producción.—Una Secretaría que utiliza to- dos los ofrecimientos y servicios.—IV. Extensión del movi- miento sindical femenino, —Los sindicatos parisienses de la calle de la Abaye.—V. Sindidatos de la aguja..—Un sindi cato mixto. — Instituciones anejas.—Las obreras de la aguja en París.—Insuficiencia de sus salarios, y temporada de va- cación (estación muerta).—Lo que ocurre en este periodo.—- Veladas y caprichos de la clientela. — VI. Lo que ha hecho la organización profesional -para atenuar el mal.—Caja de préstamos sin interés, talleres para las que carecen de tra- bajo, y caja de alquileres.—-Hospedaje de obreras que vi- ven aisladas: casas de familia.—En los bodegones peligra el estómago y la virtud de la obrera. —Restaurants para obreras. — VÍL. Un llamamiento á las iniciativas feme- ninas.
Las trabajadoras no han llegado aún á com- prender la utilidad de la organización profesional. Dos cifras bastarán para poner de relieve esta in- comprensión, ó más bien, esta hostilidad.
