Página:Turmann Iniciativas femeninas.djvu/163

Esta página no ha sido corregida

CAPÍTULO PRIMERO

OBRERAS Y MADRES DE FAMILIA

1. Dos palabras á modo de introducción.—Las mujeres y el trabajo industrial. —¿Por qué se ha recurrido al personal fe- menino?—Salario suplementario.—La mujer y los trabajos penosos.—Doce mujeres que trabajan penosamente en la descarga de un buque bajo la vigilancia del contramaestre, que fuma tranquilo su pipa.—II. El trabajo industrial con- duce á la obrera al incumplimiento de sus deberes de espo- say de madre.—La jornada de una obrera de fábrica. —Opi- nión de un cardenal inglés.—III. Nefastas consecuencias del trabajo industrial para las mujeres encinta y para sus hijos. —Dolorosa estadística. - Opinión de los médicos.—Morta- lidad infantil. —IV. Lo que se ha adoptado en diversos paí- ses de Europa. —Un acuerdo de la Conferencia de Berlín.— El ejemplo de Alemania, donde existe el seguro obligato- rio para caso de enfermedad. —V. ¿Qué se ha hecho en este sentido en Francia?—Silencio del legislador francés y es- fuerzos de la iniciativa privada. —Una disposición que se impone en un país cuyo movimiento de población perma- nece casi estacionario.—Lo que deberían hacer las mujeres de posición.

Cuando se examina el desenvolvimiento de la industria moderna, lo primero que salta á la vista es el gran número de mujeres solteras y casadas que se dedican al trabajo industrial. Puede de- cirse que en Europa y en los Estadas Unidos, pró- ximamente una cuarta parte de las mujeres (com- prendiendo las niñas) trabajan á jornal.