Página:Tragedias de Sófocles - Leconte de Lisle (Tomo I).djvu/113

Esta página no ha sido corregida
109
Edipo en Colono

¿Puedo sentarme?

EN COLONO

Siéntate de lado, y humildemente, en el extremo de esa piedra.

Padre, esto es de mi incumbencia. Mide lentamente tu paso por el mío.

¡Ay! ¡Desgraciado de mí!

Apoya tu viejo cuerpo en mi brazo amigo.

¡Oh! ¡Qué lamentable calamidad!


Antistrofa III

¡Oh desgraciado, puesto que nos has obedecido, di qué mortal te ha engendrado! ¿Quién eres, tú que vives tan miserable? ¿Cuál es tu patria?

¡Oh extranjeros, yo no tengo patria! Pero no... ¿Pues? ¡Horrible origen!

¿Qué rehusas decir, anciano?

No me preguntes quién soy y no me interrogues más.