Página:Traducciones poeticas.djvu/257

Esta página ha sido corregida
223
MEMORIAS DE LOS MUERTOS

Ora el genitor amante
Que grave al partir nos nombra,
O de una hermana la sombra
Que en silencio va adelante.
A todos, hace un instante,
Atados en lazo estrecho
Nos abrigó un mismo techo;
Y hoy ¡cuan lejos del hogar
La frente han ido á posar
En frío y desierto lecho!

Con ellos el niño tierno
Cuya cuna está vacía,
Que inerte á la tumba fría
Cayó del seno materno.
Cuantos en descanso eterno
Yacen, desde el polvo helado
De aquel asilo sagrado
Talvez murmuran dolientes:
"¿Y vosotros los vivientes
Ya nos habéis olvidado?"



De olvido no os quejéis ¡oh manes caros!
¡Oh dulces prendas de entrañable amor!
Quien se olvide de sí, podrá olvidaros;
Para quien tenga lágrimas, lloraros
Es la dicha mayor.