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CANTO GUERRERO
Si acecha á todos por ignota senda
La inevitable muerte, i qué provecho
Brinda el temor de la marcial contienda?
¡La espada empuña, avánzate derecho,
Mancebo altivo, y mientras rudo hieres,
Hierva el furor so el escudado pecho!
Mueres si hidalgo, y si menguado, mueres
Y aunque nieto de dioses te declares,
Aun no inmortal cual tus abuelos eres.
Hubo ya quien huyendo los azares
Y estruendo de las armas, á deshora
Tropezó con la muerte en sus hogares.
¡Muerte triste la suya! El que colora
La tierra en sangre y lucha cual valiente.
Ese es el digno á quien el pueblo llora.
Y si se salva, es torre que eminente
Amparando á los suyos se levanta:
Nombre de semidiós le da la gente:
Su brazo sólo ejércitos espanta.