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e

nombre


) gustaba a nuestro viajero tanto mas cuanto que era el fiel retrato i la viva imájen de un hijo que había perdido hacia algunus años.

Ten efecto, la semejanza era nolable, tenia la misma fisonomía

espresiva, las mismas facciones finas i regulares, el mismo modo de mirar dulce i lleno de intelijene? ¿ntre tanto cl coche habia llegado a la oficina; los viajeros saltaron a tierra, i la primera persona que divisó María fué su madre, a quien no habia visto hacia seis meses, Correr hácia ella, arrojarse a su cuello i colmarla de caricias, lodo esto fué abra de un instante. En cuanto al caballero que durante todo el camino habia llenado de atencionesa la niña, se hallaba total- mente olvidado; pero éste no habia perdido de vista a aquella. únicamente se mantuvo a cierta distancia para que pudiese dur libre curso a su ternura filial. Luego, cuendo el ardor de sus mutuos abrazos se hubo calmado, acercóse a la madre, i, des- pues de eumplimentarla por tener una hija tan intelgente, le dijo:

«Señora, he formado el proyecto de hacer dichosas á Ud. ia María, ide asegurar a ambas una posicion brillante para el resto de sus días. Poseo un buen caudal; pero ¿qué son las rique- zas cuando ningun afecto viene a embellecer la vida? ...... Privado hace mucho tiempo de una esposa a quien adoraba, de un niño que era wi esperanza mas querida, estoi solo. ais- lado, 3 arrastro una existencia triste i desgraciado ...... Necesito una persona que se juterese por mí, un apoyo para mi vejez, ¡este aparo lo encontrará en María: sus preciusas cuali- dades, la honda! de su corezon i la amenidad de su carácter no me dejan duda alguna acerca de esto, Permitame Ud., señora. que adopte a su hija; que yo mismo cuide de su eduencion i que me ocupe de su porvenir. Ya le tengo el afecto de n padre: 3,si me Irasmite Ud. el derecho 1 autoridad de tal, le aseguro que no tendrá de que arrepentirse : un donativo de seis mil pesos que voi a hacerle inmediatamente, ¡ademas la seguridad de que