Se dice que dentro de dos meses haya otro Congreso, i este no será lo mismo que el actual; si se trata solo de que los cuerpos lejislativos sean de pocos individuos, la Constitucion del Norte América previene que su número no pueda bajar de ciento ni pasar de 400. A mas de esto, señor, yo veo que la mocion es mui degrádame. Nada útil se puede hacer por el espíritu de partido; ¿qué dirán los pueblos cuando vean que en eso se funda la disolucion del Congreso?
Si la mayoría de la Sala insiste contra la mocíon, i aunque no sea la mayoría, yo jamas me separaré (porque no quiero quedar comprometido) hasta que junto con estos individuos nos reunamos, i no saldremos de aquí hasta haber dado un manifiesto de los motivos que han ocasionado la disolucion de este cuerpo.
El señor ▼Campino. —Cuando los diputados, que han suscrito la mocion, han protestado de palabra no concurrir mas al Congreso, no lo han hecho por amenaza sino por una imposición de sus deberes. Ellos creen que el Congreso no puede en las circunstancias hacer nada. Repiten esto de nuevo i que no pueden servir a su país ni a la República sino separándose.
Será mui justo que los señores que no convienen den un manifiesto; los que se retiren harán otro. Los pueblos harán justicia, i creo que esto está juzgado de antemano. Sin embargo, han faltado 506 diputados para ver si la Sala en su pletitud resuelve esto.
El señor ▼Presidente. —Me parece, señores, que la indicacion que me han hecho privadamente varios de los diputados que la de discusion se difiera para la sesion de mañana, es mui justa. Nada sacará el Poder Ejecutivo con que trasnochemos, yo creo que la prudencia i la circunspeccion exijen que la mocion se resuelva en otra sesion. Ella es bastante grave, se han producido razones bastante fuertes por ámbos respectos. Yo habia propuesto ántes que la Sala decidiera si quiere molestarse en seguir discutiendo la mocion o si difiere su discusion hasta el dia siguiente. Faltan tambien diputados que se hallan en el campo i que mañana estarán aquí, segun la citacion que se les ha hecho, porque se ha pedido Sala plena; en fin la Sala decidirá.
El señor ▼Rodríguez. —El señor Presidente no estuvo aquí esta tarde; por eso no sabrá que la Sala declaró que estaba en sesion permanente, i habiendo ya sancionado la Sala una cosa, no debe decidirse deshaciéndola despues. Yo creo que ella halló bastantes motivos para esto. El calor que ha habido entre los señores diputados ha sido por la justicia i la salvacion del país i es preciso tener un corazon de fiera para no socorrer al Ejecutivo, cuando nos dice que el país está en peligro, aunque sea a costa de cualquier sacrificio. Así, pido que continúe la sesion hasta que se acuerden i se den al ▼Poder Ejecutivo los medios que ha pedido.
El señor ▼Presidente. —Yo no he presidido la sesión de esta tarde, pero, segun el oficio que se va a remitir al Gobierno, en contestacion a su nota de esta mañana, me parece que ya la materia no es tan urjente que la sesion continúe hasta horas irregulares; pueda ser que su lectura determine a la Sala a diferir la sesion para mañana.
Se leyó el oficio.
El señor ▼Rodríguez. —No quiero meterme a disputar si se entiende por sesion permanente el continuar tratando un asunto hasta que se resuelva sobre él; pero me parece mui justo que estuviésemos aquí todo el tiempo necesario hasta sancionar alguna cosa.
Por lo que respecta al oficio, no se satisface al Gobierno en lo principal que él pide i es, que le dé medios para restablecer el órden, i es lo que no se contesta, porque todavía la Sala no lo ha acordado. El mismo Gobierno creería que miramos con desprecio lo que nos ha indicado; así no hai un motivo para que se acabe o se suspenda la discusion, principalmente cuando ya está al votarse i concluirse.
El señor ▼Campino. —Cuando he pedido la asistencia de los señores que faltan, no ha sido por la mortificacion que suframos, sino que, como la mocion que está en discusion afecta todos los pueblos de la República de un modo tan particular, parecía conveniente que todos tuviesen parte en su decision. Creia tambien que se evitaría toda disputa de urjencia en el asunto, prorrogando su discusion hasta mañana en que se concluyan las tres discusiones. Esto evitaría una cuestion que necesariamente se ofrecería ántes de su discusion, si e»to era tan urjente que no necesitase de las tres discusiones.
El señor Rodríguez. —Toda decision de la Sala afecta al interes jeneral de todos los pueblos, i si para cualquiera decision de la Sala no es necesaria la concurrencia de todos los diputados, tampoco para ésta es precisa la asistencia de todos.
El señor Presidente. —Propuso en votacion esta proposicion: «¿Se prorroga a la sesion de mañana la discusion de esta materia o continúa la sesion hasta que se decida?» Se aprobó la primera parte de la proposicion i se suspendió la sesion permanente a las once i media de la noche.
Dia 21
A las once de la mañana se volvió a reunir la Sala para continuar en la sesion permanente con asistencia de 38 señores.
El señor ▼Presidente. —Señores, continúa la discusion sobre la mocion pendiente del señor Campino.
El señor ▼Campino. —Parece, señor, que, despues de dos discusiones que se han tenido, estamos en el caso, para su rechazo o admision, que se discuta artículo por artículo.
El señor ▼Presidente. —Si parece a la Sala, se leerá artículo por artículo i se resolverá así.