202 HUMBERTO SALVADOR
No hay termómetro más fino para conccer la mentalidad de un hombre que intirrogarle sobre cuestioncs sexuales. El con- servador, el tonto, pueden perdonar cualquier crimzn, el más bírbaro, siempre que no tenga relación alguna con el sexo. P ro cuando del sexo s: trata, cuando «los creen que se ha ofendido aquello que llaman moral”, se aterran. En el fondo se debe, acaso, a que ellcs, ocultamente, han com:tido accio- ncs peores y, en secreto, practican todos los vicics. “El que protesta es sospechoso” dice un refrán español, Su enunciado es profundamente humano. . :
El espíritu verdaderamente sano, el que tiene una alta éti- ca basada en la b:ología y en la sociología, no se asusta pcr nada, porque comprende todo.
El hecho de que al tratarse del sexo no acepte el Código el concepto de “delito frustrado” y de que diga que “el atenta- do existe desde que hay principio de ejecución'”, prueba el terrcr cristiano ante los desvíos sexuales, que en realidad son fenómenos que casi nunca pueden corisiderarse como delitos.
El cristiano, el burgués, no comprenden que el pudor, no es sino un aliciente creado por la naturaleza para volver más su- gestivo el sexo.
Y lucgo trata el Código de la violación en forma ccncreta:
Dice:
“Art. 360.—Será castigado con reclusión mayor de cuatro a ocho años, el que hubiere cometido el crimen de violación, sea por medio de violencia o amenazas graves, sea por ardid, sea abusando de una perscna de otro sexo que, por efecto de una enfermedad, por alteración de sus facultades, o por cual- quier otra causa accidental, hubiere perdido el uso de los sen- tidos, o haya sido privada de él pcr algún artificio.
“Si el crimen ha sido cometido en una pcr.ona menor de catorce años, el culpado será castigado con ocho a doce años de reclusión mayor; y si fuere en una persona menor de once años, con reclusión mayor extraordinaria.
“Art. 361.—Será castigado con la pena de tres mescs a tres años de prisión el que por seducción o halago, violare a una mujer mayor de catorce años y mencr de veintiuno.
“Si la menor violada por halagos o seducción fuere menor de catorce años, la pena scrá de dos a cinco años de prisión; y si fuere menor de once años, el atentado se castigará con reclusión menor de tres a seis añcs.
