Esta página ha sido validada
283
ROMANCERO DEL CID
al ayo que las crió.
Dijérame á mí el ayo:
Buen Cid, non lo fagáis, non,
que los condes son muy pobres,
y tienen gran presunción;
mas por non contradeciros,
buen rey, ficéralo yo.
Treinta días duraron las bodas,
que non quisieron más, non.
Cien cabezas yo matara
de mi ganado mayor;
de gallinas y capones,
buen rey, non lo cuento, non.