Página:Romancero selecto del Cid (1884).pdf/287

Esta página ha sido validada
LXXXIV


T

res Cortes armara el rey,

todas tres á una sazón,
las unas armara en Burgos,
las otras armó en León,
las otras armó en Toledo,
donde los hidalgos son,
para cumplir de justicia
al chico con el mayor.
Treinta días da de plazo,
treinta días, que más non,
y el que á la postre viniese
que lo diesen por traidor.
Veinte y nueve son pasados,
los condes llegados son;
treinta días son pasados,
y el buen Cid no viene, non.
Allí hablaran los condes:
—Señor, dadlo por traidor.—
Respondiérales el rey:
—Eso non faría, non,
que el buen Cid es caballero
de batallas vencedor,
pues en todas las mis Cortes