LAS CENIZAS DEL GENERAL SAU MARTÍN 499
depósito nos impone, y los altos ejemplos que nos
legó el ilustre libertador. El vencedor de San Loren-
zo, de Chacabuco, de Maipo y de Lima, el principal
instigador de nuestra independencia en 1816, hecho
que fijó á la revolución un norte, afianzado años
después por victorias inmortales para nuestra histo-
ria, no se mezcló jamás en las discordias civiles ni
puso el peso de su prestigiosa espada al servicio de
propias ni de ajenas ambiciones de mando.
"Renunciando á la gloria ¡ y qué otra podría igua- larla! de consumar la independencia del continente hispano-americano, por 'exigirlo así la concordia entre los ejércitos patriotas, el soldado de los Andes se mostró más grande separándose del teatro de la guerra que como libertador de tres repúblicas.
"Ese ejemplo de abnegación y desprendimiento que bastaría para enaltecer su memoria, es una lección profunda que enseña cómo deben cumplirse los de- beres que la patria nos impone, y cómo ninguna glo- ria es superior á la del dominio sobre nosotros mis- mos, y á la conservación de la armonía entre los obreros de una noble, justa y generosa causa.
"Otra lección nos ha legado aún nuestro ilustre compatriota. Cuando después de una larga ausencia y de apurar bien amargos desengaños, volvía de Eu- ropa á Buenos Aires, despedazábanse en lucha fra-