Página:Reseñas y Críticas Ernesto Quesada.djvu/199

Esta página no ha sido corregida
191
UN LIBRO DE CANÉ

nente, monótono, idéntico, á cuyo compás se trabajaba. Aquel hombre, retorciéndose de placer, insensible al cansancio, me pareció loco" ...

Y termina el Sr. Canesú descripción de Fort-de-France con estas líneas en que trasmite la impresión que le causó un bamboula :

"...Me será difícil olvidar el cuadro, característico de aquel montón informe de negros cubiertos de carbón, harapientos, sudorosos, bailando cod un entusiasmo febril bajo los rayos de la hiz eléctrica. El tambor ha cambiado ligeramente el ritmo y bajo el, los presentes que no bailan entonan una melopea lasciva. Las mujeres se colocan frente á los hombres y cada pareja empieza á hacer contorsiones lúbricas, movimientos ondeantes, en los que la cabeza queda inmóvil, mientras las caderas, casi dislocadas, culebrean sin cesar. La música y la propia imaginación las embriaga ; el negro del tambor se agita como bajo un paroxismo más intenso aún, y las mujeres, enloquecidas, pierden todo pudor. Cada oscilación es una invitación á la sensualidad, que aparece allí bajo la forma mts brutal que he visto en mi vida ; se acercan al compañero, se estrechan, se refriegan contra él, y el negro, como los animales enardecidos, levanta la cabeza al aire y echándola en la espalda, muestra su doble fila de dientes blancos y agudos.