arca que estaua cerrada con tres Uaues, donde es- tauan los procesos que se auian hecho contra los oficiales, de los delictos que auian cometido, los quales estañan remitidos a Su Magestad, y toma- ron todos sus bienes, ropas, bastimentos de vino y azeyte y azero e hierro y otras muchas cosas, y la mayor parte dellas desaparescieron, dando saco €n todo, llamándole de U'rano y otras palabras, y lo que dexaron de la hazienda del gouernador lo pusieron en poder de quien mas sus amigos eran y los seguian, so color de deposito, y eran los mis- mos valedores que les ayudauan. V^ alian, a lo que dizen, mas de cien mil castellanos su hazienda, a los precios de alia, entre lo qual le tomaron diez veríiantines.
CAPITULO SETENTA Y CINCO
DE COMO JUNTARON LA GENTE ANTE LA CASA DE DOMINGO DE YRALA
Luego Otro dia siguiente por la mañana, los ofi- ciales, con atambor, mandaron pregonar por las ■calles que todos se juntassen delante las casas del capitán Domingo de Yrala, y alli juntos sus ami- gos y valedores con sus armas, con pregonero a altas bozes leyeron un libelo infamatorio; entre las otras cosas dixeron que tenia el gouernador orde- nado de tomarles a todos sus haziendas y tenerlos por esclauos, y que ellos por la libertad de todos le auian prendido. Y acabando de leer el dicho li- belo, les dixeron: dezid, señores: ¡libertad, liber-