y trabajoso a causa de las muchas ciénagas que ■auia y muy oran falta de agua, y que podían yr en quatro o cinco dias y que si quisiessen yr por ^o-ua en canoas por el rio arriba, ocho o diez dias.
CAPITULO CINQUENTA Y OCHO
DE COMO EL GOUERXADOR HABLO A LOS OFICIALES Y LES DIO AUISO DE LO QUE PASSAUA
Luego el gouernador mando juntar los oficiales y clérigos y siendo informados de la relación de los indios Xarayes y de los Guaraníes que están en su frontera fue acordado que con algunos indios natu- rales deste puerto para mas seguridad fuessen dos ■españoles y dos indios Guaraníes a hablar los in- dios Xarayes y viessen la manera de su tierra y pueblos e se informassen dellos de los pueblos y gentes de la tierra adentro y del camino que yua dende su tierra hasta llegar a ellos, y tuuiessen ma- nera como hablassen con los indios Guaraníes, por- que dellos mas abiertamente y con mas certeza po- drían ser anisados y saber la verdad. Este mismo díase partieron los dos españoles, que fueron Héc- tor de Acuña y Antoño Correa, lenguas e interpre- tes de los Guaraníes, con hasta diez indios Sacocíes y dos indios Guaraníes, a los quales el gouernador mando que hablassen al principal de los Xarayes y les dixessen como el gouernador los embiaua para que de su parte le hablassen y conociessen y tuuiessen por amigos a el y a los suyos y que le rogaua le viniessen a ver porque le quería hablar
