asuntos de interes mundano, porque para ellos nada significan las cuestiones que se relacionan con el alma.
No podpmos exijir que los que se encuentren en ese caso hagan uso de una fé, cuya luz, fuerza y suavidad tienen la desdicha de no conocer; les pedimos solamente que mediten sobre el ultimo fin del hombre, que acallen por un instante el grito de sus pasiones, y sean consecuentes con sus prédicas incesantes de libertad, igualdad y fraternidad.
¿Porque oponerse à la santificacion del domingo?- Porque ataca la libertad de industria, el derecho individual y los intereses del comercio, responden con ènfasis y en tono de sentencia inapelable.--Pero eso no es cierto.--Por el contrario, la libertad de industria, el derecho individual y el interes del comercio son favorecidos por ese descanso que la religion y el órden social exijen.
Los dependientes y peones y todos aquellos que viven subordinados á la voluntad de un patron se ven amparados por esa justa ordenanza, en sus principios religiosos y hasta en su propia conservacion. Seguramente no pertenecen á ese gremio de la sociedad los que se oponen al descanso que la humanidad reclama para el espíritu y la materia.
Es esta una medida saludable por todos conceptos, aun para modificar esa tendencia, funesta para nuestro país, de procurar con avidez los empleos publicos, huyendo del comercio y las industrias, precisamente porque en los primeros se disfruta del descanso en las fiestes de precepto y en los segundos se disputa ese derecho, cuando no se niega y desconoce. En ese abuso, en esa tirania ejercida sobre los mas desgraciados gremios sociales, está el origen de los comunistas y petroleros.
Hemos calificado esa medida de saludable, y por cierto que lo es, aunque solo se estudie bajo la faz del in teres material. Las estadisticas nos