cia de las sectas. A lo que aspiramos con la publicacion de esta obra dirijida á un pueblo Católico, es á impedir que la impiedad haga camino à la sombra del liberalismo, que con argumentos sin base y vacios de verdad pero que cautivan la vanidad y la ignorancia, minan los cimientos de la sociedad.
Los que procuren mayor instruccion al respecto encontrarán buenos libros en los cuales esa cuestion esta dilucidada, y destruidos victoriosamente todos y cada uno de los argumentos aducidos en contra de la Iglesia Católica, por masones, liberales, protestantes, cismáticos y toda suerte de sectarios.
Trataremos la cuestion unicamente bajo la faz juridico-social.
Sostenemos, y demostraremos en seguida que la Religion Católica es la única que debe enseñarse en las escuelas de la República Argentina.
Esta Nacion que por fortuna y gracia especial del Cielo ha crecido en el regazo maternal de la Iglesia, tiene una carta fundamental de que con razon se enorgullece, y en la cual no solo se declara que la Religion Católica es la del Estado, sinò que aun cuando reconoce la libertad de conciencia y la tolerancia de Cultos, exige que el primer magistrado de la Nacion, pertenezca á la Comunion Católica Apostolica Romana.
Si la religion del Estado es la Católica, y desde que la Iglesia no está separada de este, sinó que por el contrario, forma parte de nuestras instituciones y dirije la Nacion de consuno con el poder Civil, toda tentativa que se haga para sustraer al pueblo á la obediencia de esa Iglesia ó para su plantar à la religion católica con cualquiera otra creencia, es un atentado contra nuestro Código fundamental, es un crimen de lesa Patria.