Encontré á Dios en medio de los mares,
en sus noches tranquilas y serenas,
dejé de recordar mis patrios lares
y olvidé mis dolores y mis penas;
yo no había visto á Dios en los altares
mas lo hallé de la playa en las arenas,
en las montañas de nevada espuma
y en las rocas veladas por la bruma.
Al conocer de Dios el poderío
y al comprender su sabia omnipotencia,
hallé en la humanidad un gran vacío:
que la unidad faltaba á esta existencia.
Entre honores y glorias, ví al impío,
y á la virtud sumida en la indigencia,
y dije: la creación es una obra
en donde un algo falta, ó algo sobra.
Porqué unos gozan mil y mil placeres
y otros sufren tormentos sin medida?
¿porqué, Señor, distingues á los seres,
para unos muerte, y para esotros vida?
¿porqué á los miserables los prefieres
dándoles recompensa inmerecida?
¿y en tanto un alma delicada y pura,
por no encontrar, ni encuentra sepultura?
Tú que distes perfumes á las flores,
y á las eternas olas su murmullo,
y al refulgente sol sus resplandores,
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Ramos de violetas