Página:Platón - La República (1805), Tomo 1.djvu/171

Esta página ha sido validada
(85)

instrumentos de qualquier otra arte que sea, por mas que se tome en mano, formará ningun artesano ni atleta, ni servirá de nada, á ménos que no se tenga un conocimiento exacto de cada arte y se hubiese exercitado en él por mucho tiempo. Glauc. Si esto así fuese, serian por cierto muy apreciables los instrumentos. Soc. Segun esto, quanto de mayor importancia es el oficio de estos custodios del estado, tanto necesitará de mas desembarazo de los otros, de mas estudio y de mayor cuidado. Glauc. Yo así lo pienso.

Soc. No se necesitan tambien disposiciones particulares para desempeñar bien este empleo? Glauc. Sin duda ninguna. Soc. Luego nuestra obligacion seria al parecer, en quanto pudiesemos, escoger entre los diferentes caractéres los que sean mas á propósito para la custodia de un estado. Glauc. No tiene duda que esta eleccion deberia ocuparnos. Soc. Par diez, que nos encargamos de una cosa bien dificil: sin embargo no perdamos ánimo, adelantemos miéntras nos lo permitan las fuerzas. Glauc. En efecto no debemos acobardarnos. Soc. Encontrais vos que se diferencian en algo, en órden á la custodia, las propiedades de un perro de buena raza y las de un jóven guerrero? Glauc. Qué quereis vos decir? Soc. Quiero decir que uno y otro deben tener agudo el sentido para descubrir al enemigo, ligereza para perseguirle en descubriéndolo, y fuerza para combatirle, si dándole alcance