El nombre honor no es más que un trofeo mentiraso que se vé en infinitos sepulcros; un esclavo servil de los panteones que casi siempre está mudo en las tumbas de los patricios venerables, relegadas al polvo y al infame olvido. — Acto 2.º, esc. 3.ª
La virtud que peca, es solo un parche de pecados, y el pecado que se enmienda, un pegote de virtudes. — Acto 1.º, esc. 5.ª
La decrepitud que postra al cuerdo aumenta la simpleza del tonto. — Acto 1.º, esc. 5.ª
Los sábios que se extasían grandemente oyendo á ciertos payasos de fama, son á mi ver, algo menos que bufones de los mismos payasos. — Acto 1.º, esc. 5.ª
El bufon con título de tal, aunque se pase la vida motejando, no injuria jamás; como tampoco injuria en lo más mínimo el hombre de reconocida discrecion, aun cuando no haga otra cosa que censurar. — Acto 1.º, esc. 5.ª
El placer se hace pagar más temprano o más tarde. — Acto 2.º, esc. 4.ª
Los que juegan diestramente con las palabras pronto las hacen livianas: — Acto 3.°, esc: 1.ª