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o destruirla. Para poder hacer al tonal "flexible y tolerante" debemos liberarlo de todas las "porquerías energéticas" que hemos ido recogiendo por la vida y hemos ido depositando en la isla, hasta saturarla y, por consiguiente, gastamos toda la energía que poseemos.

Un guerrero entiende que tiene muy poco tiempo en la Tierra y que en cualquier instante puede morir; por ello sabe que debe limpiar su isla a través del ahorro de energía para poder entrar a la otra parte de sí mismo, que es el nagual.

El guerrero busca sobre todas las cosas llegar a la totalidad; sabe que sólo hay tiempo para la impecabilidad; lo demás agota su poder, la impecabilidad lo renueva permanentemente. La impecabilidad consiste en hacer de la mejor forma todo cuanto uno haga; dicho en otras palabras, el ahorro constante y sistemático de la energía, ahorro constante que se acumula y allí radica el "poder personal".

“Debes preocuparte del nagual sólo en ciertos momentos —dijo—. El resto del tiempo, tú y yo somos como cualquier otra gente de este mundo...

—Nunca te he prohibido hablar —dijo él—. Podemos hablar del nagual todo lo que se te dé la regalada gana, siempre y cuando no trates de explicarlo. Si recuerdas correctamente, dije que el nagual es sólo para presenciarse. Conque podemos hablar de lo que presenciamos y de cómo lo presenciamos. Pero tú quieres abordar la explicación de cómo es todo aquello posible, y eso es una abominación. Quieres explicar el nagual con el tonal. Eso es una estupidez, especialmente en tu caso, puesto que tú ya no puedes esconderte en tu ignorancia. Tú sabes muy bien que nosotros tenemos sentido al hablar sólo porque permanecemos dentro de ciertas fronteras, y esas fronteras no se aplican al nagual...

La meta de un brujo es durar; es decir, no corre riesgos innecesarios, por ello pasa años barriendo su isla hasta el momento en que puede, por así decirlo, escaparse de ella...

—Un ser inmortal tiene todo el tiempo del mundo para dudas y desconciertos y temores. Un guerrero, en cambio, no puede aferrarse a los significados que se hacen bajo las órdenes del tonal, porque el guerrero sabe con certeza que la totalidad de sí mismo tiene sólo un poquito de tiempo sobre esta tierra...

—Un guerrero no puede sentirse desamparado —dijo él—. Ni desconcertado ni asustado, bajo ninguna circunstancia. Para un guerrero, sólo hay tiempo para su impecabilidad; todo lo demás agota su poder, la impecabilidad lo renueva... "La impecabilidad es hacer lo mejor que puedas en lo que fuese..."

La clave de todos estos asuntos de impecabilidad es el sentido de tener o no tener tiempo. Por regla general, cuando te sientes y actúas como un ser inmortal que tiene todo el tiempo del mundo, no eres impecable; en esos momentos debes volverte, mirar alrededor tuyo, y entonces te darás cuenta de que tu sentimiento de tener tiempo es una idiotez. ¡No hay sobrevivientes en esta tierra!...” C.C.

LAS ALAS DE LA PERCEPCIÓN

Don Juan dice que, aparte de la disciplina, lo que podría ser favorable en el camino del conocimiento es tener sensibilidad. Generalmente en el mundo del tonal y la razón de repente surgen "chispazos" de otro tipo de percepción de la realidad; como diría Don Juan: "los susurros del nagual". Para dejarse guiar por el susurro del nagual debemos detener nuestro diálogo interno y abrir las alas de la percepción.

“Si vieras lo que hay en mi casa, te darías cuenta de que sé demasiado para ser un hombre común, pero si me vieras con el nagual, te darías cuenta de que no sé lo suficiente...

—¡No hay futuro! —exclamó, cortante—. El futuro no es más que una manera de hablar. Para un brujo sólo existe el aquí y el ahora...” Don Juan.

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