reunir azufre en sus bordes, depositado allí por los humos calientes. (Se pone en duda de como se indica arriba. E.)
"El Barón Von Humboldt fue el primero, que llegó a la de boca del cráter, pero él no descendió al mismo; se contentó con hacer algunas observaciones astronómicas y al igual que el Barón Von Gros, que estuvo ahí mucho más tarde, después publicó un análisis geológico del volcán.
"En el año 1856, se realizó una expedición científica, encabezada por el Ingeniero General Gaspar Sánchez Ochoa. Hasta entonces nunca había sido hecho una descripción exacta del Popocatépetl y fue sólo a través de esta expedición, que se obtuvieron planos del interior de la montaña, así como una descripción de la proyección horizontal del cráter, y del cráter mismo, sus depósitos de azufre, etc., que fueron publicados poco después, incluyendo un análisis de química, geológica y botánica.
"Por el trabajo de esta expedición se comprobó que el Popocatépetl se eleva a diez y nueve mil cuatrocientos cuarenta y tres pies por encima del nivel de mar, según el barómetro del Gaylusac, que, de hecho, difiere ligeramente de la declaración de diez y nueve mil cuatrocientos cuarenta pies de Von Humboldt sobre el nivel del mar.
"Los campos de nieve del volcán cubren una superficie de más de tres mil metros, que se extiende desde su mutilada cumbre hasta las regiones arenosas sus laderas, donde se puede ver y observar las devastaciones y efectos producidos por sus antiguas y temerosas erupciones de lava y materia incadescente, así como muchas de basalto negro y gris basalto, toda clase de tezontles, valiosas piedras de diferentes colores, rojo, amarillo y arcilla negra.
"Las excavaciones, que se hacen en las laderas, donde existe vegetación, han revelado muchos restos de carbón vegetal en avanzado estado de petrificación, que claramente testifica que un inmenso numero de árboles debieron ser carbonizados por lava caliente, fluyendo a tal gran distancia.
"Sería muy difícil designar con alguna exactitud el tiempo de la primer erupción del Popocatépetl, que puede ser tan remota como cuatro mil años, a juzgar por el resultado de
