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ORÍGEN DE LAS ESPECIES

ratones de campo, que destruyen sus panales y nidos: el coronel Newman, que ha estudiado mucho tiempo las costumbres de las abejas, cree que más de las dos terceras partes de estas son destruidas por aquellos en toda Inglaterra. Ahora bien; el número de ratones depende mucho, como todo el mundo sabe, del número de gatos; dice el coronel Newman que cerca de las ciudades y aldeas ha observado que son más numerosos que en otras partes los nidos de las abejas, lo cual atribuye al número de gatos que destruyen los ratones. De aquí que sea perfectamente creible que la presencia de gran número de animales felinos en una localidad determine por la intervencion, primero de los ratones, y luego de las abejas, que sean frecuentes ciertas flores en aquella localidad.

En el caso de cada especie probablemente entran en juego muchos obstáculos diferentes que obran en diferentes épocas de la vida y en diferentes estaciones ó años; uno ó unos pocos entre ellos siendo generalmente los más potentes, pero todos concurriendo para determinar el término medio del número de individuos y hasta la existencia de la especie. En algunos casos se puede reconocer que obstáculos completamente diferentes obran sobre la misma especie en localidades diversas. Cuando miramos á las plantas y arbustos que revisten una orilla intrincada, tentados estamos á atribuir á lo que llamamos casualidad el número y las clases. ¡Pero qué falsa es esta manera de ver! Todo el mundo ha oido decir que cuando se desmonta un bosque americano, la nueva vegetacion que brota es muy diferente; pero se ha observado que las ruinas indias antiguas de los Estados-Unidos del Sur, las cuales debieron haber estado limpias de árboles en otro tiempo, despliegan hoy la misma hermosa diversidad y proporcion de clases que en los bosques vírgenes que las rodean. ¡Qué lucha debe haber estado empeñada allí durante siglos enteros entre las diversas clases de árboles, todos ellos esparciendo anualmente á millares sus semillas! ¡qué guerra entre insecto y insecto, entre insectos, caracoles y otros animales con los pájaros y bestias de presa, todos esforzándose para aumentarse, todos alimentándose unos de otros ó de los árboles, ó de las semillas y retoños, ó de otras plantas que poblaban primero el terreno, y que de este modo se oponian al crecimiento de los árboles! Tirad al aire un puñado de plumas y todas caen al suelo en virtud de leyes definidas; pero