Proclaman que adoptemos la honradez valerosa
Que asegura la fama de la joven esposa;
Porque la patria es bella y es joven todavía,
Y es propio de la llama consumir la bujía.
Que el egoísmo es perro traicionero, y guarda
Mal la heredad hermosa cuando la ración tarda.
Que no hay casa estimable cuando no tiene adentro
La llama hospitalaria por amistoso centro.
Y que no hay garantía tan fiel para la puerta,
Como la del vecino que la halla síempre abierta.
Que el sol de la bandera no cobije intereses
Bastardos, proveyendo la igualdad de las mieses
Y la paz de los hombres con justiciero rayo;
Pues ya la junta el mismo 25 de Mayo,
Ordenó en su proclama que el porvenir encierra:
«Llevad hasta los últimos términos de la tierra»
La persuación de vuestra cordialidad». Y el Canto
De las primeras glorias, con grito sacrosanto