Página:Novelas de Voltaire 1.djvu/158

Esta página ha sido corregida

gajazos nos haceis horadar los montes para sacar una especie de polvo amarillo que para nada es bueno, y que no vale, ni con mucha, un cebollino de Egipto. Así quando os encontramos nosotros, y podemos mas, os obligamos á que labreis nuestras tierras, y de lo contrario os cortamos las narices y las orejas.

No habia réplica á tan discreto razonamiento. Fuí á labrar el campo de una negra vieja por conservar mis orejas y mi nariz, y al cabo de un año me rescatáron. Habiendo visto todo quanto bueno, hermoso y admirable hay en la tierra, me determiné á no ver mas que mis dioses penates: me casé en mi pais, fuí cornudo, y ví que era la mas grata condicion de la vida humana.



Fin de los viages de Escarmentado.