AL MARQUÍS DE SÉVIGNÉ 153
de todos los apoyos extraños que mantienen esa virtud de que os enorgullecéis, tal vez en dos días fueseis más despreciable que ellas, porque vos tenéis medios de poneros á cubierto de esa desgracia. No os despojo, sin embargo, del mérito de vuestra virtud; no quiero obtener de vos más que un poco de iridul- gencia para las que una inclinación demasiado impe- tuosa ó la desgracia de las circunstancias, ha preci- pitado en una situación tan humillante á sus propios ojos; mi único objeto es convenceros de que no debéis vanagloriaros tanto de poseer una cualidad de que no sois causa y de la cual podéis veros pri- vada el día menos pensado. »
Iba á continuar, pero alguien nos interrumpió. Muy pronto mi propia experiencia me hizo conocer que no debía tener tan buena opinión de algunas virtudes — empezando por la mía, — que tan meritorias me habían parecido hasta entonces.
