noche. Ni siquiera el congelamiento de un pie me impidió dormir profundamente por primera vez durante muchas noches.
“9. A la una de la mañana de este día, oí la exclamación ¡'la goleta'! Y luego la vi cruzando desde el canal Bárbara con un buen viento. Antes de que fondeara en caleta Gallant, fui a bordo, y, para mi alegría, encontré a los tenientes Skyring y Graves, y a todos sus compañeros bien, habiendo completado a fondo el trabajo que tenían que realizar, sin pérdidas, o incluso un accidente. La dificultad de su tarea había aumentado por el muy mal tiempo; pero lograron el trazado y levantamiento del canal Magdalena hasta su unión con el mar, y luego regresaron por el canal Bárbara a caleta Gallant, llevando a cabo una cadena regular de triángulos, y conectando su trabajo con puntos previamente fijados en el estrecho de Magallanes. Una multitud de pequeñas islas, y un muy mal tiempo los detuvieron por más tiempo de lo que habían esperado.
“Mientras los tenientes Skyring y Graves, ayudados por el Sr. Kirke, se dedicaban al levantamiento, el Sr. Bynoe recogía muestras geológicas y de otra índole.*[1]
“11. Casi habíamos llegado al día más corto; el sol no se levantó sobre los cerros hasta pasado las once; desapareció de nuevo antes de las dos (la tierra es menos alta hacia el NO.), y aún en esas tres horas era rara vez visible.
“12. Al comprobar que el teniente Skyring estaba de acuerdo conmigo en la idea de que el canal desde el cabo Tamar hasta el golfo Trinidad debía ser levantado por el Adelaide, en su viaje a San Carlos de Chiloé, decidí enviarlo a él y al teniente Graves en esta comisión, esperando que ello los llevara a descubrir un paso en el seno Skyring, y darle a las naves otra vía de entrar o salir del Estrecho, en caso de mal tiempo o vientos contrarios se oponen a ellos en el canal habitual.
“Para tomar esta decisión hubo mucho que ser considerado. Como yo no había recibido ninguna orden del comandante King de emplear al Adelaide en levantamientos, después de su regreso del canal Magdalena; y como había deseado dirigirme, con él, a San Carlos, en Chiloé, durante cuyo viaje el Teniente
- ↑ * Geol. Soc. Museum, Nos. 176 a 205, y Zool. Mus.
