Página:Menosprecio de corte y alabanza de aldea (1922).pdf/169

Esta página no ha sido corregida
167
 

do!, pues no hay quien contigo pueda bivir y menos se apoderar; porque si cómo poco, estoy flaco, y si mucho, ando hinchado; si oamino, cánsome; si estoy quedo, entorpézcome; si doy poco, llámanme escaso, y si mucho, pródigo; si estoy solo, assómbrome, y si acompañado, importúnome; si visito a menudo, tómanlo a importunidad, y si de tarde en tarde, a presumpción. Si suffro injurias, dizen que es poquedad, y si las vengo, que es crueldad; si tengo amigos, importúnanme, y si enemigos, persíguenme; si estoy siempre en un lugar, siento hastío, y si me mudo a otro, enójome; finalmente, digo que lo que aborrezco me hazen tomar y lo que amo no puedo alcançar. O mundo inmundo!, yo que fuí mundano conjuro a ti, mundo, requiero a ti, mundo, ruego a ti, mundo, y protesto contra ti, mundo, no tengas ya más parte en mí, pues yo no quiero ya nada de ti ni quiero más esperar en ti, pues sabes tú mi determinación, y es que:

POSUI FINEM OURIS; SPES ET FORTUNA, VALETE