Página:Los Anales de Cayo Cornelio Tácito. Tomo II (1891).pdf/22

Esta página no ha sido corregida
16
Cayo Cornelio Tácito.

esfuerzos de guerra, pero dió orden que se retirasen las guarniciones de acá del Rhin.

Y de hecho le llegaron á Corbulón las cartas en esta sustancia, cuando estaba ya moviendo la tierra para plantar los alojamientos en país enemigo. El, eyendo una tan súbita resolución, y tomado al improviso, puesto que se le representaron á un mismo tiempo muchas cosas en la fantasía, el miedo que tenía al emperador, el menosprecio en que le tendrían aquellos bárbaros, y la burla que harían de él los confederados, todavía diciendo solas estas palabras: «¡Oh, qué dichosos fueron antiguamente algunos de los capitanes romanos!» dió la seña para retirarse. Con todo eso, porque los soldados no estuviesen ociosos, les hizo hacer un canal de cerca de seis leguas entre la Mosa y el Rhin para enjugar aquel país, gastado de las inciertas inundaciones del Océano; y César, aunque le negó la guerra, no dejó de concederle las insignias del triunfo. Poco después obtuvo la misma honra Curcio Rufo (1), por haber abierto en los campos Matiacos (2) una mina de plata, aunque de poco provecho y de menos dura. Mas á las légiones, a más del peligro, era desagradable el trabajo de agotar aguas, cavar la tierra y hacer debajo de ella lo que en campaña abierta se hace con dificultad: oprimidos los soldados de tan penosos y bajos ejercicios, y porque en otras provincias se padecía lo mismo, escribieron secretamente cartas en nombre de los ejércitos, suplicando al emperador que de allí adelante á cualquiera á quien diese cargo de gobernar ejércitos les diese ante todas cosas las insignias y honores triunfales.

Del origen de Curcio Rufo, hijo, según han dicho algunos, de un gladiator, no querría referir mentira, puesto (1) Este Curcio Rufo quieren algunos que fué Curcio, el que escribió la vida y hechos de Alejandro.—N. del T. E.

(2) Comarca de la Germania, más allá del Rhin.