Página:Los Anales de Cayo Cornelio Tácito. Tomo II (1891).pdf/162

Esta página no ha sido corregida
156
Cayo Cornelio Tácito.

de cada uno, cuáles se iban entregando voluntariamente, y cuáles desamparaban los lugares retirándose á sitios fuertes y montuosos. Y hubo muchos que con su mujeres y cosas de más estima se escondieron en cuevas. Y asimismo el capitán romano procedía diversamente con ellos, mostrándose piadoso con los humildes, diligente con los fugitivos, y con los que buscaban escondrijos fiero y cruel, abrasándolos dentro con hinchir las bocas y respiraderos de las cuevas de fagina y sarmientos encendidos. Al pasar por los confines de los Mardos (1), le acometió aquella gente, acostumbrada á robar á los caminantes y á retirarse luego, tomando por guardia la aspereza de los montes. A éstos destruyó Corbulón, echándoles en su tierra á los Iberos; con que á costa de sangre extranjera castigó la temeridad de los enemigos.

Pero él y su ejército, aunque no recibieron daño por las armas, no dejaron de padecer muchos trabajos por falta de vituallas: tal, que cuando por buena suerte hallaban algún ganado, eran forzados á matar la hambre con carne sola.

Añadíase la gran falta de agua y ardor del estío. Mas todo esto y el fastidio de tan larga jornada no era posible mitigarse con otra cosa que con la paciencia del general y el verle sufrir más incomodidades y trabajos que al menor soldado. Con esto llegaron al fin á tierras cultivadas, donde segaron los panes; y de dos castillos donde se habían retirado los Armenios, tomaron el uno al primer asalto, y (1) Según Anquetil Duperron, era un pueblo pastor, que habitaba primitivamente al Este del mar Caspio, y que á consecuencia de emigraciones totales ó parciales, se estableció sucesivamente en la Carmania desierta, en las puertas Caspias, en la Media Atropatene, al Norte del Euxino, y que al través de la ruina de los imperios y bajo las dominaciones de los Persas, de los Griegos, de los Partos y de los Romanos, supo, á favor de su vida nómada y de sus costumbres salvajes, conservar su nacionalidad é independencia.