y los persiguio hasta meterlos por las puertas delas ciudades de Hoba, y Phenice: las quales caé ala mano yzquierda dela famosa ciudad de Damasco. Hecha esta valerosa hazaña, recogio Abrahá a sus caualleros, y con buen orden trayendo cósigo muchos catiuos, y riqueza, se boluio para su Real. Sabida esta vitoria por el santo Rey, y sacerdote Mel chisedech, lo salio a recebir amorosamente, y ofreciédo pá, y vino, por ella, dio gracias al Señor, dizié do assi: Bendito eres gran Capita Abraham por el Emperador soberano, el qual crio los cielos, y la tierra: y bendita sea su diuina Majestad, por la mise ricordia que te hizo, pues guardando tu generosa persona enla batalla, te puso a tus enemigos enlas manos, y te dio victoria dellos co tanta horra, y fa nioso renōbre. Tābien le salio al encuetro el Rey de Sodoma, y lo recibio muy honrradamente. De manera q la fama deste Capita famoso, conesta victoria se começo a estender por el mundo, tanto q tuuo noticia della el sabio Alegorin, y enla mesma hora q la supo, caualgo en su ligero quartao, yvesti do de ropas de grana, mostrando por ellas el alegria dela victoria, vino alas tiendas donde Abraha estaua. Hallolo en su pauellon acompañado del Rey Melchisedech, y de Basa Rey de Sodoma, y vi no en punto, q hablado este Rey co Abrahaacerca dela diuisio delos despojos, le pedia los catiuos, diziédo, q le diesle las almas, y el se qdasse có lo restate. Ya auia dado Abrahá al Rey, y Sacerdote Melchifedech, las decimas dela presa, el qual estaua ma rauillado dela santimonia, y magnificécia, deste ma gnanimo Capita. Entoces viedo Alegorin la injusta
de-
