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PLUTARCO.—LAS VIDAS PARALELAS.

otros que él mismo tomó hierbas para esta efecto, y otros que sus enemigos, echándose sobre él en aquella noche, le cortaron la respiracion. Y al cabo Escipion estavo de cuerpo presente para que todos le viesen, y su cadáver, registrado por todos, pudo dar alguna sospecha y conocimiento; pero Rómulo desapareció repentinamente, sin que 86 viese ni miembro de su cuerpo ni giron de su vostido; babiendo conjeturado algunos que tos Senadores cargaron sobre él en el templo de Vulcano, le despedazaron, y repartieron entre si el cuerpo, llevándose cada uno en el seno una partecita. Otros opinan que ni fué en cl lemplo de Vulcano, ni se hallaban solos los Senadores cuando Rómulo fué quilado del medio, sino que esto oeurrió fuera, junto al lago llamado de la Cabra ó de la Cierva, donde aquél estaba celebrando una junta půblica; y que en el aire sueedieron entónces de repente fenómenos maraviliosos, superiores á cuanto puede ponderarse, y trastornos inereibles; que la luz del sol se eclipsó, y sobrevino una noche nada serena y tranquila, sino con terribles truenos y huracanes violentos, que de todas parles movian gran borrasca. En esto, lo que es la plobe se dispersó y dió á huir, y los principales viaieron á las manos entre si: cuando luégo, desvanecida la tormenta y reslituida la luz, volvió con esto á reunirse el pueblo, todos buscaban y deseaban var al Rey; pero los principales no se lo permitian, ni les daban tugar para bablar ea ello, sino que los exbortaban 4 venerar á Rómulo, como arrebatado á la mansion de los Dioses, y convertido de buen Rey que habia sido, en un Dios benéfico para ellos. Creyólo la mayor parte, y se retiraron contentos, venerándolo con las más lisonjeras esperanzas; pero bubo algunos que reconvinieron ágria y desabridamente á los patricios sobre este hecho, inquietándolos y acusáodolos de que querian hacer creer l puebio tos mayores absurdos, despues de baber ellos sido los niatadores del Rey.