ba; su color era rojizo, la parte extorna estaba hervida ó volcanizada de un aspecto esponjoso; en la interna que pude ver, se encontraba formado de un granito compacto de color gris; acerqué el termómetro cosa de 30" y aumentó 20", no habiendo podido permanecer más tiempo por el peligro que amenazaba.
» Al llegar a la meseta marcaba el termómetro 10°, y no pasó de 15" mientras permanecimos en aquel lugar.
ANDAR SOBRE EL AGUA.
VELOCIPEDO DE VAPOR.
»Los derrumbes continuaron con ciertos intervalos, haciéndose notar en cada uno de ellos un desprendimiento de vapor; luego un ruido particular semejante al que produce la cal al apagarse; después la división de las rocas cayendo inmediatamente sobre las mas bajas que encuentran á su paso formando todas una columna de polvo y vapor, que se disuelve muy pronto; el ruido producido por estas caídas es variado, semeja á veces al de un saco de carbón que se vacia, otras al de una cascada lejana y otras al de las olas del mar rompiendo sobre las rocas. Diversas ocasiones al ver desprenderse las masas de lava, aplicaba el oido al terreno para percibir mejor el sonido que producían en su caída, el cual era fuerte y sonoro, lo que me haría creer que la capa de terreno que estaba bajo mis pies ora todavía bastante espesa y sólida. El cimbramiento que se produce es débil comparado á la mole que cae, dependiendo del terreno que está formado hasta una cierta profundidad de fragmentos de lava antigua.
»A las diez la atmósfera empezó á despejarse, y mientras mis compañeros se ocuparon de tomar unas vistas fotográficas, me dirigí de nuevo á la eminencia que me había propuesto subir, caminando con tal suerte que á los tres cuartos de hora la niebla habia desaparecido, y á las once y media estaba en el punto deseado viendo la extensión que me separaba de los volcanes y la superficie toda del mamelón. Según lo que me dijo el guia, el espacio ocupado por el promontorio de lavas nuevamente arrojadas, lo formaba antes una meseta poco inclinada, cuya extensión calculé en 20,000 metros cuadrados, limitada por el lado del volcan de nieve por una arcada de cerros, que viniendo del Poniente del punto de la Joya, va á terminar al Oriente al lugar llamado la Joyita, que queda en las vertientes del de Fuego que ven para San Marcos.
»La altura del cráter sobre el principio de la meseta, punto final de la vegetación, es de cosa de 400 metros; el vértice del mamelón que se ha formado sobre esta, al Noreste del cono del volcan, está cosa de 100 metros más bajo extendiéndose su perímetro ó parte baja por el Este, cosa de 3;>0 metros hasta llegar á las vertientes que forman el principio del barranco de San Marcos; por el Norte, cosa de 300, llegando á la arcada de cerros que he descrito antes, excepto en algunos puntos donde ha formado una rampa ó cantil muy inclinado de alturas variables, pero que no bajan de 30 metros, y al Noroeste cosa de 400.
»Los derrumbes que se verifican del perímetro del mamelón, invaden diariamente un espacio de terreno de 3 á 6 metros.
»La superficie del mamelon es rojiza llena de puntas de figuras variadas; su forma es la de un cono de vértice deprimido interceptado oblicuamente de arriba para abajo por el lado del Sur-oeste, por el del volcan; de su cima sale una columna de humo constante y de varias partes de los otros puntos, despren-
