pasar mas arriba que el fondo del valle mas bajo. El rio sigue rápido pero uniforme, conservando su dirección general al norte, orillando casi siempre la ribera izquierda, encontrando varias islas bajas con arbustos, navegamos sin accidente hasta las 10 de la mañana.
« El fondo variable de uno á cuatro metros; la corte riente de seis á siete millas.
« En fin á las 12 estábamos otra vez en el agua, habiendo hecho hasta allí unos 32 kilómetros.
« A la una encontramos el rio dividido en 3 ó 4 brazos iguales.
« Antes hablamos encontrado ya algunas islas, mas la gran diferencia de anchura que aparecía en los brazos no permitía la indecisión y era fácil escojer entre ellos.
« Aquí eran todos iguales, escojimos con bastante suerte, pero engañados al fin por la apariencia de la superficie, tomamos un brazo de poco fondo; la embarcacion tocaba y todos por un movimiento instintivo saltamos al agua para aliviarla, y la arrastramos hasta encontrar mas agua.
« Apenas embarcados nos esperaban peligros de otra clase.
« El rio corria allí por entre rocas desnudas y perpendiculares, dando numerosas vueltas; la mayor profundice dad estaba en la concavidad siempre, pero temíamos encontrar rocas, y siguiendo la cuerda del arco teniamos menos fondo.
« Resolvimos pues, cortar derecho, bogando con toda fuerza.
« Al principio salimos bien, obrando de este modo, porque los codos no estaban muy cerca unos de otros, pero cuando se sucedían inmediatamente, dirigidas sus curvas en sentido contrario, la maniobra era muy difícil,