Página:La ciudad de Dios - Tomo IV.pdf/26

Esta página no ha sido corregida
24
San Agustín

tros y celebran los pueblos, lo atribuyen á la vanidad de las fábulas, para que hubiese materia para inventar juegos que aplacasen á los dioses, aun imputándoles culpas falsas. l'or estos tiempos corría la fama de Hércules en Tyria, pero éste fué otro, no aquel de quien hablamos arriba; porque en la historia más secreta y religiosa se refiere que hubo muchos Liberos padres y muchos Hércules. De este Hércules cuentan doce hazañas muy heroicas, entre las cuales no insertan la muerte del africano Anteo, por pertenecer esto al otro Hércules. Refieren en sus historias que él mismo se quemó en el monte Oeta, no habiendo podido sufrir y llevar con paciencia, y con aquella virtud y valor heroico con que había sujetado los monstruos, la enfer medad que padecía. Por estos tiempos el rey, ó, por mejor decir, el tirano Busiris, sacrificaba sus huéspedes á sus dioses. Dicen que fué hijo de Neptuno, habido en Libia, hija de Epapho; pero no creamos que Neptuno cometió este estupro, ni acusemos á los dioses, sino atribúyase á los poetas y teatros, para que haya materia con que aplacar á aquellos. De Erictonio, rey de los atenienses, en cuyos últimos años se halla que murió Josué, dicen que fueron sus padres Vulcano y Minerva; mas por cuanto quieren que Minerva sea doncella, explican que en la controversia y debates que tuvieron ambos, jugueteando Vulcano, con el movimiento violento de los saltos, derramó el semen en la tierra, y que a lo que nació de esta semilla le pusieron aquel nombre, porque en griego eris significa lid ó porfía, y cton la tierra, y de estos dos se compuso el nombre de Erictonio. Con todo, lo que no debe olvidarse es que los más doctos refutan y niegan estas sutilezas de sus dioses, diciendo que esta opinión fabulosa nació de que se halló el muchacho expuesto en un templo que había en Atenas dedicado á Vulcano y Minerva, enros-