grande sobre todos los dioses»; porque cuando dice (1).
«terrible es sobre todos los dioses», la razón porque así lo dijo lo declara adelante; y prosigue quoniam omnes Dii Gentium dæmonia, Dominus autem Ceelos facit, «porque todos los dioses de los gentiles son demonios, y el Señor es solamente el que hizo los cielos»: dijo, pues, terribles sobre todos los dioses, esto es, sobre todos los dioses de los gentiles, á quienes éstos tienen por tales, siendo así que son demonios, es terrible para ellos, y por eso con miedo y terror decían al Señor (2): «¿Para qué viniste á perdernos y atormentarnos antes de tiempo?»» Donde dice igualmente Dios de los dioses, no puede entenderse dios de los demonios, y donde dice rey grande sobre todos los dioses, librenos Dios de proferir que es rey ó caudillo grande sobre todos los demonios: también llama la misma Escritura sagrada dioses á los hombres del pueblo de Dios (3): «yo dije, dice, dioses sois, y todos hijos del excelso»; por lo que podemos entender por Dios de estos dioses, al que llamó Dios de estos dioses y sobre tales dioses, rey grande al que dijo que era rey grande sobre todos los dioses: pero cuando nos preguntan, supuesto que se llaman dioses los hombres por individuos del pueblo de Dios, con quien habla el Señor por medio de los ángeles o por los hombres, ¿cuánto más dignos serán de este honorífico dietado los inmortales que gozan de aquella bienaventuranza, á donde, airviendo á Dios, desean los hombres llegar? ¿Qué hemos de responder sino que en vano la Escritura llama más expresamente dioses á los hombres que á los inmortales y bienaventurados, á quienes se nos promete que seremos iguales en la re(1) Salmo 95: Terribilis est super omnes Deos.
San Maro., cap. I: Venisti ante tempus perdere nos.
Salmo 18: Ego.dizi, Dii estis, et Filii Excelsi omnes.
TOMо II.
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