llegaron a Antiochîa; y congregada la Iglesia, entregaron la carta,
31 que fue leida con gran consuelo y alegría.
32 Júdas y Sílas por su parte, siendo como eran tambien Profetas [1], consolaron y confortaron con muchísimas reflexiones á los hermanos.
33 Y habiéndose detenido allí por algun tiempo, fueron remitidos en paz por los hermanos á los que los habian enviado.
34 Verdad es que a Sílas le pareció conveniente quedarse allí; y así Júdas se volvió solo á Jerusalem.
— 35 Pablo y Bernabé se mantenían en Antiochîa, enseñando y predicando con otros muchos la palabra del Señor.
36 Mas pasados algunos dias, dijo Pablo á Bernabé: Demos una vuelta visitando á los hermanos por todas las ciudades, en que hemos predicado la palabra del Señor, para ver el estado en que se hallan.
37 Bernabé para esto queria llevar tambien consigo a Juan, por sobrenombre Márcos.
38 Pablo al contrario le representaba, que no debian llevarle, (pues les habia dejado desde Pamphylia, y no les habia acompañado en aquella mision).
39 La disension entre los dos vino a parar en que se apartaron uno de otro. Bernabé, tomando consigo a Márcos, se embarcó para Chypre.
40 Pablo, eligiendo por su compañero á Sílas, {em-