ticia, no es hijo de Dios, y así tampoco lo es el que no ama á su hermano:
11 en verdad que esta es la doctrina que aprendísteis desde el principio: que os ameis unos á otros.
12 No como Cain, el cual era hijo del maligno espíritu, y mató á su hermano. ¿Y por qué le mató? Porque sus obras eran malignas, y las de su hermano justas.
13 No extrañeis, hermanos, si os aborrece el mundo [1]
14 Nosotros conocemos haber sido trasladados de muerte á vida, en que amamos á los hermanos. El que no los ama, queda en la muerte, ó está sin caridad:
15 cualquiera que tiene ódio á su hermano, es un homicida [2]. Y ya sabeis que en ningun homicida tiene su morada la vida eterna.
16 En esto hemos conocido la caridad de Dios, en que dió el Señor su vida por nosotros, y así nosotros debemos estar prontos á dar la vida por la salvacion de nuestros hermanos.
17 Quien tiene bienes de este mundo, y viendo á su hermano en necesidad, cierra las entrañas para no
- ↑ Porque claro está que vuestra vida es una condenacion contínua y perentoria de sus vicios.
- ↑ Delante de Dios, que vé su deseo de perder al prójimo. De todos los crímenes se puede decir lo que del adulterio declaro el Señor, Matth. V. v.28.