Página:La Sagrada Biblia (XIII).djvu/42

Esta página ha sido corregida
34
SAN MATHEO.

2 y abriendo su boca divina [1], los adoctrinaba diciendo:


  1. Se ha puesto el adjetivo divina que, aunque ya está de letra cursiva á fin de denotar que no se halla expreso en el texto, parece no hay necesidad de añadirle para expresar el sentido literal del Evangelista, ni evitar algun error ó mala inteligencia. Sin embargo, como semejante expresion ó modismo de la lengua hebrea no esta en uso en la nuestra, seria redundante, á no ser cuando á la palabra boca se le añade algun adjetivo, como divina, dulce, sonora, etc. Pudiera haberse traducido: Y abriendo su boca, los adoctrinaba, diciendo; á no creer conveniente prevenir á los lectores sencillos contra la sátira ó impia mofa que un incrédulo de nuestros dias, cuyo veneno se ha esparcido por España, ha hecho contra la divinidad de los Evangelios. Esta frase hebrea, ó circunloquio, muy propio y de mucha energía y dignidad en el estilo oriental, se propone como locucion pueril y ridícula, por la sola razon de que es por demas advertir que, para hablar ó predicar un sermon el predicador, abrió la boca. Ya hubo un antiguo filósofo que objetaba lo mismo á los cristianos; y ya entónces S. Agustin, Theodoreto y otros deshacian esta insulsa y necia objecion, diciendo, que aquel modismo de que usó S. Matheo, denota en el estilo y genio de la lengua hebrea y otras del Oriente la importancia de lo que va á decirse, la extension del discurso, y tambien la autoridad y dignidad de la persona que habla: modismo que vemos usado por Homero varias veces, y aun por algunos escritores castellanos antiguos, y hasta por nuestros poetas modernos. Con el mismo fin de prevenir á los lectores contra otras semejantes impias sátiras, se han puesto las mas de las palabras que se ven intercaladas con letra cursiva, que á primera vista parecerán supérfluas á los lectores instruidos, los cuales realmente no necesitan de ellas.