73 conforme al juramento con que juró á nuestro padre Abraham que nos otorgaría la gracia
74 de que, libertados delas manos de nuestros enemigos, le sirvamos sin temor,
75 con verdadera santidad y justicia, ante su acatamiento, todos los dias de nuestra Vida.
76 Y tú ¡oh niño! tú serás llamado el Profeta del Altisimo; porque irás delante del Señor á preparar sus caminos,
77 enseñando la ciencia de la salvacion á su pueblo, para que obtenga el perdon de sus pecados,
78 por las entrañas misericordiosas de nuestro Dios, que ha hecho que ese Sol naciente ha venido á visitarnos de lo alto del cielo [1],
79 para alumbrar á los que yacen en las tinieblas y en la sombra de la muerte; para enderezar nuestros pasos por el camino de la paz [2].
80 Mientras tanto el niño iba creciendo, y se fortalecia en el espíritu; y habitó en los desiertos hasta el tiempo en que debia darse á conocerá Israél.
- ↑ Malach. IV. v. 2.
- ↑ Véase Oriente.